Efemérides de Venezuela: Febrero
01 de Febrero de 1562: Fundación de Cumaná
El
1º de febrero de 1562 el fraile dominico Francisco de Montesinos funda
la ciudad de Nueva Córdoba, a la orilla izquierda del río Cumaná. Este
sería el primer centro urbano de la tierra firme oriental.
El nombre de Nueva Córdoba persistió hasta 1591, cuando pasa a llamarse Cumaná. Ni el establecimiento de misioneros, ni la fortaleza construida en Cumaná pueden tenerse como fundación de la que más tarde sería la ciudad de Cumaná.
Hoy esta hermosa ciudad es la capital del Estado Sucre, ubicada a la entrada del golfo de Cariaco y frente a la península de Araya y es la capital más oriental de Venezuela. Ha sido cuna de ilustres venezolanos como Antonio José de Sucre, Gran Mariscal de Ayacucho; Andrés Eloy Blanco, etc.
El nombre de Nueva Córdoba persistió hasta 1591, cuando pasa a llamarse Cumaná. Ni el establecimiento de misioneros, ni la fortaleza construida en Cumaná pueden tenerse como fundación de la que más tarde sería la ciudad de Cumaná.
Hoy esta hermosa ciudad es la capital del Estado Sucre, ubicada a la entrada del golfo de Cariaco y frente a la península de Araya y es la capital más oriental de Venezuela. Ha sido cuna de ilustres venezolanos como Antonio José de Sucre, Gran Mariscal de Ayacucho; Andrés Eloy Blanco, etc.
01 de Febrero de 1817: Nacimiento de Ezequiel Zamora
Ver 10 de Enero – Muere Ezequiel Zamora.
02 de Febrero de 1806: Primera Expedición de Miranda
Con
una tripulación abigarrada, formada por vagos y maleantes de los
muelles de Nueva York, norteamericanos, austríacos, franceses, polacos,
etc., sale Miranda con su expedición el 2 de febrero con destino a las
costas de 1806, y el honroso objetivo de conquistar su libertad.
A bordo del Leandro, Miranda enarbola por primera vez la bandera venezolana: amarillo, azul y rojo. Hace que todos aquellos «soldados» juren fidelidad a esa bandera y al libre pueblo de Sudamérica.
Parecen cosas propias de un soñador, de un verdadero iluso.
El barco era de doscientas toneladas y tenía 18 cañones. Miranda se había apertrechado con 1.500 fusiles, 50 rifles, 300 pares de pistolas, doscientas espadas, 40 cañones, municiones en abundancia para los cañones y los fusiles, 150 barriles de pólvora, unas cinco mil lanzas, vestuarios de tropa y de oficiales, etc. También se cuidó el Precursor de incluir una imprenta, en la que imprimió las proclamas que enviaría a tierra firme.
Como la expedición no se había preparado en absoluto secreto, las autoridades diplomáticas de España en los Estados Unidos se han dado cuenta y han informado al Gobierno de Venezuela que Miranda se dirige a sus costas con el Leandro y dos goletas más: Bachus y Bee, que han sido contratadas en Haití.
A bordo del Leandro, Miranda enarbola por primera vez la bandera venezolana: amarillo, azul y rojo. Hace que todos aquellos «soldados» juren fidelidad a esa bandera y al libre pueblo de Sudamérica.
Parecen cosas propias de un soñador, de un verdadero iluso.
El barco era de doscientas toneladas y tenía 18 cañones. Miranda se había apertrechado con 1.500 fusiles, 50 rifles, 300 pares de pistolas, doscientas espadas, 40 cañones, municiones en abundancia para los cañones y los fusiles, 150 barriles de pólvora, unas cinco mil lanzas, vestuarios de tropa y de oficiales, etc. También se cuidó el Precursor de incluir una imprenta, en la que imprimió las proclamas que enviaría a tierra firme.
Como la expedición no se había preparado en absoluto secreto, las autoridades diplomáticas de España en los Estados Unidos se han dado cuenta y han informado al Gobierno de Venezuela que Miranda se dirige a sus costas con el Leandro y dos goletas más: Bachus y Bee, que han sido contratadas en Haití.
03 de Febrero de 1795: Nacimiento de Antonio José de Sucre
El
General Antonio José de Sucre nació en la ciudad de Cumaná, provincia
de Venezuela, el 3 de Febrero de 1795, de padres ricos y distinguidos.
Recibió su primera educación en la capital de Caracas. En el año de 1802, principió sus estudios en Matemática para seguir la carrera de ingeniero. Empezada la revolución se dedicó a esta arma y mostró desde los primeros días una aplicación y una inteligencia que lo hicieron sobresalir entre sus compañeros. Muy pronto empezó la guerra, desde luego el General Sucre salió a campaña. Sirvió a las órdenes del General Miranda con distinción en los años 11 y 12. Cuando los Generales Mariño, Piar, Bermúdez y Valdez emprendieron la reconquista de su patria, en el año de 13, por la parte oriental, el joven Sucre les acompañó a una empresa la más atrevida y temeraria. Apenas un puñado de valientes, que no pasaban de ciento, intentaron y lograron la libertad de tres provincias. Sucre siempre se distinguía por su infatigable actividad, por su inteligencia y por su valor. En los célebre campos de Maturín y Cumaná se encontraba de ordinario al lado de los más audaces, rompiendo las filas enemigas, destrozando ejércitos contrarios con tres o cuatro compañías de voluntarios que componían todas nuestras fuerzas. La Grecia no ofrece prodigios mayores.
Recibió su primera educación en la capital de Caracas. En el año de 1802, principió sus estudios en Matemática para seguir la carrera de ingeniero. Empezada la revolución se dedicó a esta arma y mostró desde los primeros días una aplicación y una inteligencia que lo hicieron sobresalir entre sus compañeros. Muy pronto empezó la guerra, desde luego el General Sucre salió a campaña. Sirvió a las órdenes del General Miranda con distinción en los años 11 y 12. Cuando los Generales Mariño, Piar, Bermúdez y Valdez emprendieron la reconquista de su patria, en el año de 13, por la parte oriental, el joven Sucre les acompañó a una empresa la más atrevida y temeraria. Apenas un puñado de valientes, que no pasaban de ciento, intentaron y lograron la libertad de tres provincias. Sucre siempre se distinguía por su infatigable actividad, por su inteligencia y por su valor. En los célebre campos de Maturín y Cumaná se encontraba de ordinario al lado de los más audaces, rompiendo las filas enemigas, destrozando ejércitos contrarios con tres o cuatro compañías de voluntarios que componían todas nuestras fuerzas. La Grecia no ofrece prodigios mayores.
04 de Febrero de 1992: El golpe de Estado del 4 de febrero de 1992
En
horas de la madrugada del 4 de febrero de 1992, un grupo de militares
intenta infructuosamente un golpe de estado contra el Presidente Carlos
Andrés Pérez. La acción golpista, identificada con el nombre de «MBR-200
Movimiento Revolucionario Bolivariano», estuvo encabezada por los
Comandantes Hugo Chávez Frías, Francisco Javier Arias Cárdenas, Jesús
Urdaneta, Noé Acosta, entre otros, con ramificaciones en Caracas,
Maracay, Valencia y Maracaibo.
A las 8 de la mañana el Gobierno logró controlar la situación, y el Comandante Chávez, en una fugaz alocución por televisión, anunciando su rendición, dijo a sus compañeros que abandonaran las armas para evitar derramar más sangre, añadiendo que «por ahora nuestros objetivos no fueron logrados en la ciudad. Es decir, nosotros no logramos controlar el poder.»
El Consejo de Ministros acordó la suspensión parcial de las garantías, lo que originó un encendido debate en el Congreso Nacional, en que se destacaron Rafael Caldera, entonces líder máximo de Copei, y Aristóbulo Istúriz, dirigente de La Causa R y futuro Alcalde de Caracas.
Los cabecillas del golpe militar fueron encerrados en el Cuartel San Carlos y luego trasladados a una cárcel de Yare, a la espera del juicio correspondiente. A partir del discurso pronunciado este día en el Congreso, Rafael Caldera se mantuvo en el tope de la popularidad en todas las encuestas, hasta el día 5 de diciembre de 1993, en que fue elegido Presidente de la República.
Es, precisamente, Rafael Caldera quien concede el indulto a los comprometidos en el golpe de febrero. Uno a uno van saliendo de las cárceles; el último es Hugo Chávez, quien ha estado actuando intensamente en la política, liderizando el «Movimiento Bolivariano».
El comandante Francisco Javier Arias Cárdenas, una vez indultado, fue nombrado Director del Programa Alimentario Materno infantil (PAMI), al cual renunció para presentarse como candidato a gobernador del Estado Zulia, aspiración que satisfizo al ser elegido para ese cargo el 3 de diciembre de 1995. Y reelecto nuevamente en Noviembre de 1998, en el mismo año en que el Comandante Hugo Chávez ganó la Presidencia de la República.
A las 8 de la mañana el Gobierno logró controlar la situación, y el Comandante Chávez, en una fugaz alocución por televisión, anunciando su rendición, dijo a sus compañeros que abandonaran las armas para evitar derramar más sangre, añadiendo que «por ahora nuestros objetivos no fueron logrados en la ciudad. Es decir, nosotros no logramos controlar el poder.»
El Consejo de Ministros acordó la suspensión parcial de las garantías, lo que originó un encendido debate en el Congreso Nacional, en que se destacaron Rafael Caldera, entonces líder máximo de Copei, y Aristóbulo Istúriz, dirigente de La Causa R y futuro Alcalde de Caracas.
Los cabecillas del golpe militar fueron encerrados en el Cuartel San Carlos y luego trasladados a una cárcel de Yare, a la espera del juicio correspondiente. A partir del discurso pronunciado este día en el Congreso, Rafael Caldera se mantuvo en el tope de la popularidad en todas las encuestas, hasta el día 5 de diciembre de 1993, en que fue elegido Presidente de la República.
Es, precisamente, Rafael Caldera quien concede el indulto a los comprometidos en el golpe de febrero. Uno a uno van saliendo de las cárceles; el último es Hugo Chávez, quien ha estado actuando intensamente en la política, liderizando el «Movimiento Bolivariano».
El comandante Francisco Javier Arias Cárdenas, una vez indultado, fue nombrado Director del Programa Alimentario Materno infantil (PAMI), al cual renunció para presentarse como candidato a gobernador del Estado Zulia, aspiración que satisfizo al ser elegido para ese cargo el 3 de diciembre de 1995. Y reelecto nuevamente en Noviembre de 1998, en el mismo año en que el Comandante Hugo Chávez ganó la Presidencia de la República.
04 de Febrero de 1944: Muerte del poeta Agosto Méndez
El
9 de julio de 1871 nace en Ciudad Bolívar el médico, poeta, periodista y
filántropo José Manuel Agosto Méndez. Este ilustre guayanés,
considerado como uno de los más destacados poetas de su región, formó
parte de las comisiones de Sanidad, Escolar y de Rentas, Ejidos y
Estadísticas, nombradas en el Congreso de Municipalidades de 1911.
En el ejercicio político, al Dr. Agosto Méndez le tocó representar a su estado como Diputado suplente para el período de 1919-1921 y posteriormente como Senador suplente durante los períodos constitucionales de 1921-1924 y 1924-1927. Corno periodista fue colaborador d e «El Cojo Ilustrado», Director de la “Gaceta Médica” de Ciudad Bolívar y de la Revista “Horizontes”. También ejerció la docencia como profesor del Colegio Federal de Ciudad Bolívar. Escribió la letra del Himno de su Estado natal.
Muere Juan Manuel Agosto Méndez en Ciudad Bolívar el 4 de febrero de 1944, después de una densa labor en beneficio de su pueblo bolivarense.
En el ejercicio político, al Dr. Agosto Méndez le tocó representar a su estado como Diputado suplente para el período de 1919-1921 y posteriormente como Senador suplente durante los períodos constitucionales de 1921-1924 y 1924-1927. Corno periodista fue colaborador d e «El Cojo Ilustrado», Director de la “Gaceta Médica” de Ciudad Bolívar y de la Revista “Horizontes”. También ejerció la docencia como profesor del Colegio Federal de Ciudad Bolívar. Escribió la letra del Himno de su Estado natal.
Muere Juan Manuel Agosto Méndez en Ciudad Bolívar el 4 de febrero de 1944, después de una densa labor en beneficio de su pueblo bolivarense.
06 de Febrero de 1818: Paéz toma Las Flecheras
Pensando
en la conveniencia de tomar a Caracas, Bolívar concibe la idea de
atravesar el río Apure, pero no tiene las flecheras necesarias.El 6 de
febrero de 1818 expone su plan a Páez y éste le dice que puede contar
con las embarcaciones españolas que estaban del otro lado del río. Al
preguntarle Bolívar que cómo las tomaría, Páez le responde que lo hará
con la caballería.
-¿Dónde está esa caballería de agua? Porque con la de tierra no se puede hacer tal milagro.
Entonces, Páez escoge cincuenta de sus mejores lanceros de la Guardia de Honor, se lanzan a las aguas y nadando contra la corriente, con las lanzas en la boca, llegaron hasta las embarcaciones y las abordaron de inmediato, causando tal pánico entre los realistas que casi no pudieron defenderse y atemorizados hicieron algunos disparos abandonaron las embarcaciones y se arrojaron al agua para salvarse en la orilla opuesta.
Este episodio, que presenció el Libertador lleno de asombro, se conoce con el nombre de Toma de las Flecheras, en el Paso del Diamante, este río tiene 700 metros de ancho en este punto.
-¿Dónde está esa caballería de agua? Porque con la de tierra no se puede hacer tal milagro.
Entonces, Páez escoge cincuenta de sus mejores lanceros de la Guardia de Honor, se lanzan a las aguas y nadando contra la corriente, con las lanzas en la boca, llegaron hasta las embarcaciones y las abordaron de inmediato, causando tal pánico entre los realistas que casi no pudieron defenderse y atemorizados hicieron algunos disparos abandonaron las embarcaciones y se arrojaron al agua para salvarse en la orilla opuesta.
Este episodio, que presenció el Libertador lleno de asombro, se conoce con el nombre de Toma de las Flecheras, en el Paso del Diamante, este río tiene 700 metros de ancho en este punto.
06 de Febrero de 1843: Nacimiento de Raimundo Andueza Palacios
Presidente
venezolano nacido en Guanare, estado Portuguesa, el 6 de febrero de
1843. Auspiciado por Rojas Paúl, y, en consecuencia, por el liberalismo
guzmancista, llega al Poder Raimundo Andueza Palacio el 20 de marzo de
1890. Tenía, pues, 47 años para el momento de asumir la Presidencia.
La elección de Andueza fue hecha, tal como lo establecía la Constitución, por el Consejo Federal. Sólo que el nuevo Presidente quiere reformar la Constitución porque dos años le parecen muy poco tiempo para gobernar, y en ese querer prolongar su Gobierno le sobrevino el aventón.
Andueza Palacio hizo sus primeros estudios en Guanare, completó allá el Bachillerato en Ciencias Filosóficas (1858) y hasta inició en su tierra natal la carrera de Derecho, que culminaría en la Universidad de Caracas con la licenciatura, primero, y luego con el grado de Doctor en Derecho Civil, en 1874.
Su condición de Secretario del Presidente de la República en 1866, a los 23 años de edad, le brindó la oportunidad a Andueza de conocer el Poder de cerca. El virus de la política se le sembró en los huesos y continuó ininterrumpidamente: tiene 26 años cuando derriba de una bofetada a un intruso que se cuela en el famoso baile de Guzmán Blanco el 14 de agosto de 1869, y desde entonces se hace agradable a la vista del futuro Autócrata, quien lo escogerá luego, en 1874, para que pronuncie en el Panteón el discurso en honor a Falcón.
Andueza será Diputado, Senador y Presidente del Congreso; Ministro de Relaciones Exteriores, de Hacienda, de Instrucción Pública, de Relaciones Interiores; es decir, toda una carrera de activismo político en los Gobiernos de Falcón, Guzmán, Linares Alcántara, Crespo y Rojas Paúl; además de dos pasantías por la Presidencia de la República, en ausencia de Guzmán y de Linares Alcántara.
Andueza fue un notable tribuno y periodista. Tenía buen carácter y buenas ganas de continuar en el Poder. Por eso, al vencérsele el período el 20 de febrero de 1892, con el pretexto de reformar la Constitución para alargar el mandato, se aguantó cuatro meses más, hasta que fue obligado a entregar el Gobierno en manos del Presidente del Consejo Federal, Guillermo Tell Villegas.
Salió Andueza Palacio al exilio. Regresó en 1898, y al año siguiente es Ministro de Relaciones Exteriores, colgado de la espada victoriosa de Cipriano Castro. Andueza muere en Caracas, el 17 de agosto de 1900. El Cabito lo calificó de «servidor fervoroso de la causa liberal y notable hombre público».
La elección de Andueza fue hecha, tal como lo establecía la Constitución, por el Consejo Federal. Sólo que el nuevo Presidente quiere reformar la Constitución porque dos años le parecen muy poco tiempo para gobernar, y en ese querer prolongar su Gobierno le sobrevino el aventón.
Andueza Palacio hizo sus primeros estudios en Guanare, completó allá el Bachillerato en Ciencias Filosóficas (1858) y hasta inició en su tierra natal la carrera de Derecho, que culminaría en la Universidad de Caracas con la licenciatura, primero, y luego con el grado de Doctor en Derecho Civil, en 1874.
Su condición de Secretario del Presidente de la República en 1866, a los 23 años de edad, le brindó la oportunidad a Andueza de conocer el Poder de cerca. El virus de la política se le sembró en los huesos y continuó ininterrumpidamente: tiene 26 años cuando derriba de una bofetada a un intruso que se cuela en el famoso baile de Guzmán Blanco el 14 de agosto de 1869, y desde entonces se hace agradable a la vista del futuro Autócrata, quien lo escogerá luego, en 1874, para que pronuncie en el Panteón el discurso en honor a Falcón.
Andueza será Diputado, Senador y Presidente del Congreso; Ministro de Relaciones Exteriores, de Hacienda, de Instrucción Pública, de Relaciones Interiores; es decir, toda una carrera de activismo político en los Gobiernos de Falcón, Guzmán, Linares Alcántara, Crespo y Rojas Paúl; además de dos pasantías por la Presidencia de la República, en ausencia de Guzmán y de Linares Alcántara.
Andueza fue un notable tribuno y periodista. Tenía buen carácter y buenas ganas de continuar en el Poder. Por eso, al vencérsele el período el 20 de febrero de 1892, con el pretexto de reformar la Constitución para alargar el mandato, se aguantó cuatro meses más, hasta que fue obligado a entregar el Gobierno en manos del Presidente del Consejo Federal, Guillermo Tell Villegas.
Salió Andueza Palacio al exilio. Regresó en 1898, y al año siguiente es Ministro de Relaciones Exteriores, colgado de la espada victoriosa de Cipriano Castro. Andueza muere en Caracas, el 17 de agosto de 1900. El Cabito lo calificó de «servidor fervoroso de la causa liberal y notable hombre público».
06 de Febrero de 2015: Fallece Pedro León Zapata
Ver 27 de Febrero de 1929: Nace Pedro León Zapata
07 de Febrero de 1826: Bolívar en Potosí
El
7 de febrero de 1826 entra el Libertador a Lima, en medio de los más
cálidos homenajes, después de haber libertado cinco Repúblicas y clavado
en el Potosí las banderas de las nuevas naciones.
Bolívar se había extasiado en el Potosí, en cuya cumbre expresó: «En cuanto a mí, de pie sobre esta mole de plata, cuyas venas riquísimas fueron durante trescientos años el erario de España, yo estimo en nada esta opulencia cuando la comparo con la gloria de haber traído victorioso el estandarte de la libertad desde las playas ardientes del Orinoco para fijarlo aquí, en el pico de esta montaña, cuyo seno es el asombro y la envidia del universo».
Bolívar se había extasiado en el Potosí, en cuya cumbre expresó: «En cuanto a mí, de pie sobre esta mole de plata, cuyas venas riquísimas fueron durante trescientos años el erario de España, yo estimo en nada esta opulencia cuando la comparo con la gloria de haber traído victorioso el estandarte de la libertad desde las playas ardientes del Orinoco para fijarlo aquí, en el pico de esta montaña, cuyo seno es el asombro y la envidia del universo».
07 de Febrero de 1816: Bolívar Jefe Supremo
El
7 de febrero de 1816, en un barrio de Los Cayos (Haití), en casa de
Juana Bourvil, a los gritos de ¡Viva Venezuela!, Simón Bolívar es
elegido por una asamblea de patriotas venezolanos y granadinos como Jefe
Supremo, y le confieren toda la autoridad civil y militar para
organizar la expedición que debía salir de Los Cayos.
En esta población se encontraban más de seiscientos emigrados de Venezuela y Nueva Granada. A esta reunión de patriotas asistieron, entre otros, Santiago Mariño, Manuel Piar, Gregorio Mc. Gregor, Francisco Bermúdez, Luis Brión, Carlos Soublette, Pedro Briceño Méndez, Bartolomé Salom, Manuel Valdés, José Antonio Anzoátegui, Chipía, Tomás Hernández, Vicente Landaeta, José Gabriel Pérez, Ducodray Holstein, Chamberlain, Demarquet, el comisionado Marimón, Francisco Antonio Zea, José Ucrós…
Atrás quedarían las intrigas de los mismos hermanos, el duelo a que retó Montilla a Bolívar, evitado por la oportuna intervención de Marimón; el desafío de Mariño a Brión; las peleas entre Ducodray Holstein y Soublette; la intriga de Bermúdez …en fin, éste y Montilla se quedarán fuera de la expedición, y santo remedio … por los momentos. Al fin y al cabo, Bolívar es el Jefe Supremo.
En esta población se encontraban más de seiscientos emigrados de Venezuela y Nueva Granada. A esta reunión de patriotas asistieron, entre otros, Santiago Mariño, Manuel Piar, Gregorio Mc. Gregor, Francisco Bermúdez, Luis Brión, Carlos Soublette, Pedro Briceño Méndez, Bartolomé Salom, Manuel Valdés, José Antonio Anzoátegui, Chipía, Tomás Hernández, Vicente Landaeta, José Gabriel Pérez, Ducodray Holstein, Chamberlain, Demarquet, el comisionado Marimón, Francisco Antonio Zea, José Ucrós…
Atrás quedarían las intrigas de los mismos hermanos, el duelo a que retó Montilla a Bolívar, evitado por la oportuna intervención de Marimón; el desafío de Mariño a Brión; las peleas entre Ducodray Holstein y Soublette; la intriga de Bermúdez …en fin, éste y Montilla se quedarán fuera de la expedición, y santo remedio … por los momentos. Al fin y al cabo, Bolívar es el Jefe Supremo.
07 de Febrero de 1859: Muere Agustín Codazzi
Ver 11 de Julio de 1793: Nace Agustín Codazzi
08 de Febrero: Muerte de Cristóbal Mendoza
Ver 23 de Junio de 1772: Nacimiento de Cristóbal Mendoza.
10 de Febrero de 1824: Bolívar Dictador en Perú
Para los peruanos es insufrible ya la
situación, la anarquía reina por doquier, y la amenaza realista crece.
El 10 de febrero de 1824 Bolívar es nombrado Dictador del Perú, para que
controle las riendas.
Su actuación, de hecho, produjo los frutos deseados. El decreto del Congreso del Perú dice: «Considerando …que sólo un poder dictatorial depositado en una mano fuerte, capaz de hacer la guerra, cual corresponde a la tenaz obstinación de los enemigos de nuestra independencia, puede llenar los ardientes votos de la representación nacional…la suprema autoridad política y militar de la República queda concentrada en el Libertador Simón Bolívar».
Eran los días en que el Perú agradecido confiaba en el Libertador y depositaba en él toda su esperanza. No fue defraudado este país sureño, cuando ese mismo año de 1824 Bolívar logró desbaratar la anarquía de los inadaptados, y para cerrar con broche de oro el 9 de diciembre Sucre vence en Ayacucho dando libertad al Perú y al resto de la América dominada entonces por los españoles.
Su actuación, de hecho, produjo los frutos deseados. El decreto del Congreso del Perú dice: «Considerando …que sólo un poder dictatorial depositado en una mano fuerte, capaz de hacer la guerra, cual corresponde a la tenaz obstinación de los enemigos de nuestra independencia, puede llenar los ardientes votos de la representación nacional…la suprema autoridad política y militar de la República queda concentrada en el Libertador Simón Bolívar».
Eran los días en que el Perú agradecido confiaba en el Libertador y depositaba en él toda su esperanza. No fue defraudado este país sureño, cuando ese mismo año de 1824 Bolívar logró desbaratar la anarquía de los inadaptados, y para cerrar con broche de oro el 9 de diciembre Sucre vence en Ayacucho dando libertad al Perú y al resto de la América dominada entonces por los españoles.
10 de Febrero de 1827: Nacimiento de Martín Tovar y Tovar
Martín
Tovar y Tovar es autor de numerosos retratos y de obras históricas,
como «La Firma del Acta de la Independencia» concluida en 1883 y la
magistral «Batalla de Carabobo», pintada para la cúpula del Salón
Elíptico del Palacio Legislativo de Caracas. En este mismo Salón una
importante galería de Próceres.
Este destacado pintor venezolano nació en Caracas, el 10 de febrero de 1827 y tuvo profesores de dibujo como Carmelo Fernández Carranza y Celestino Martínez. Bajo estos maestros recibe los primeros conocimientos acerca de la pintura, hasta que a la edad de 23 años viaja a Europa, a España y se inscribe en la Real Academia de San Fernando de Madrid, donde recibe clases de José Federico de Madrazo y Antonio Esquivel. Con el tiempo se traslada a Francia, estableciéndose en París, y se inscribe en la Escuela de Bellas Artes bajo la dirección del pintor León Cogniet. Se inició así su formación artística, con influencia de los pintores neoclásicos franceses. Regresa, después de cumplir ya los 27 años, a Venezuela, convertido en un pintor profesional y dispuesto a poner sus conocimientos al servicio de la patria.
En Venezuela se dedica a la pintura de retrasos, para la cual poseía una aptitud muy singular para captar los rasgos del modelo con sentido plástico. Su obra como retratista es extensa, conociéndose una amplia galería de retratos de próceres y personajes importantes de la independencia.
Guzmán Blanco lo favorece con su protección, encargádole la formación de una galería de hombres célebres para decorar el salón elíptico del Capitolio Federal, obras que realiza en París. Todas estas obras se caracterizan por su habilidad técnica, agrupación de figuras, y el paisaje en donde están bien resueltos los problemas de escorzos y perspectivas. El crítico de Arte Juan Calzadilla nos dice respecto a la pintura de Martín Tovar y Tovar: “Tovar trata de fundir la concepción lineal y escultórica propia del Neoclasicismo con la exaltación cromática y el movimiento de las formas propugnados por los románticos”. “Su credo estético podría definirse clásico en la forma y romántico en el contenido”.
A partir de 1890 Tovar y Tovar se niega a ejecutar obras históricas y se dedica completamente a la paisajística. Puede decirse de este pintor que fue uno de los primeros venezolanos que retrató fielmente la naturaleza; su estilo tuvo marcada influencia en pintores como Herrera Toro y Arturo Michelena. Martín Tovar y Tovar murió en Caracas, a los 64 años de edad, el 17 de diciembre de 1902.
Algunas de sus obras más conocidas son: La Batalla de Carabobo, Boyacá, Junín, Ayacucho, Retratos de doña Juan Vernie, Anita Tovar de Zuloaga, Josefina Gil de Zamora, Antonio Tovar, Soublette, Monagas.
Este destacado pintor venezolano nació en Caracas, el 10 de febrero de 1827 y tuvo profesores de dibujo como Carmelo Fernández Carranza y Celestino Martínez. Bajo estos maestros recibe los primeros conocimientos acerca de la pintura, hasta que a la edad de 23 años viaja a Europa, a España y se inscribe en la Real Academia de San Fernando de Madrid, donde recibe clases de José Federico de Madrazo y Antonio Esquivel. Con el tiempo se traslada a Francia, estableciéndose en París, y se inscribe en la Escuela de Bellas Artes bajo la dirección del pintor León Cogniet. Se inició así su formación artística, con influencia de los pintores neoclásicos franceses. Regresa, después de cumplir ya los 27 años, a Venezuela, convertido en un pintor profesional y dispuesto a poner sus conocimientos al servicio de la patria.
En Venezuela se dedica a la pintura de retrasos, para la cual poseía una aptitud muy singular para captar los rasgos del modelo con sentido plástico. Su obra como retratista es extensa, conociéndose una amplia galería de retratos de próceres y personajes importantes de la independencia.
Guzmán Blanco lo favorece con su protección, encargádole la formación de una galería de hombres célebres para decorar el salón elíptico del Capitolio Federal, obras que realiza en París. Todas estas obras se caracterizan por su habilidad técnica, agrupación de figuras, y el paisaje en donde están bien resueltos los problemas de escorzos y perspectivas. El crítico de Arte Juan Calzadilla nos dice respecto a la pintura de Martín Tovar y Tovar: “Tovar trata de fundir la concepción lineal y escultórica propia del Neoclasicismo con la exaltación cromática y el movimiento de las formas propugnados por los románticos”. “Su credo estético podría definirse clásico en la forma y romántico en el contenido”.
A partir de 1890 Tovar y Tovar se niega a ejecutar obras históricas y se dedica completamente a la paisajística. Puede decirse de este pintor que fue uno de los primeros venezolanos que retrató fielmente la naturaleza; su estilo tuvo marcada influencia en pintores como Herrera Toro y Arturo Michelena. Martín Tovar y Tovar murió en Caracas, a los 64 años de edad, el 17 de diciembre de 1902.
Algunas de sus obras más conocidas son: La Batalla de Carabobo, Boyacá, Junín, Ayacucho, Retratos de doña Juan Vernie, Anita Tovar de Zuloaga, Josefina Gil de Zamora, Antonio Tovar, Soublette, Monagas.
10 de Febrero de 1954: Diseño y establecimiento del Escudo Nacional
Fue
diseñado y establecido como Escudo Nacional por Ley del 10 de Febrero
de 1954, luego de surgir varias trasformaciones a partir de 1830, fecha
en la que Venezuela se separa de la gran Colombia.
El Escudo desde los años iniciales de la separación de Venezuela de la Gran Colombia, el Escudo Nacional ha sufrido varias modificaciones, estableciéndose en esas oportunidades que los tres cuarteles tendrán los colores del Pabellón Nacional e incluirá los símbolos (espigas, banderas y caballo blanco).
Aunque fue decretado por el Congreso de la República, el 18 de abril de 1836 -contando con el asesoramiento de Sir Robert Ker Porter en la heráldica y Carmelo Fernández en el dibujo, para que sustituyera, con algunas modificaciones, el Escudo de Armas de la Gran Colombia, así como reformado por la Constitución Federal y aún por Cipriano Castro en 1905, su forma actual la estableció el Congreso de la República mediante un decreto del 17 de febrero de 1954. [Descripción del Escudo Nacional de Venezuela]
El Escudo desde los años iniciales de la separación de Venezuela de la Gran Colombia, el Escudo Nacional ha sufrido varias modificaciones, estableciéndose en esas oportunidades que los tres cuarteles tendrán los colores del Pabellón Nacional e incluirá los símbolos (espigas, banderas y caballo blanco).
Aunque fue decretado por el Congreso de la República, el 18 de abril de 1836 -contando con el asesoramiento de Sir Robert Ker Porter en la heráldica y Carmelo Fernández en el dibujo, para que sustituyera, con algunas modificaciones, el Escudo de Armas de la Gran Colombia, así como reformado por la Constitución Federal y aún por Cipriano Castro en 1905, su forma actual la estableció el Congreso de la República mediante un decreto del 17 de febrero de 1954. [Descripción del Escudo Nacional de Venezuela]
11 de Febrero de 1870: Muere Carlos Soublette
El
11 de febrero de 1870 murió en Caracas el ilustre prócer, insigne
hombre público y Presidente de la República Carlos Soublette. Muere a
los 80 años de edad.
Como homenaje póstumo a este servidor de la Patria, el señor Felipe Santiago Casanova escribió: «Hoy, al pagar su tributo a la naturaleza, después de ochenta años de edad, el soldado en los días de peligro, el Magistrado en el Despacho Administrativo, el Diplomático defendiendo los derechos de su Patria en Europa, el Legislador en muchas de nuestras Asambleas, y el estadista a quien tanto debe esa misma patria, deja por toda fortuna a su familia una noble indigencia y un nombre inmaculado».
Los oficios religiosos se realizaron el día 14 en la Iglesia Metropolitana de donde el cadáver fue trasladado al cementerio de Los Hijos de Dios. El Diario «La Opinión Nacional» completa a necrología:
«Deja un bastón -el que usó cuando fue el Jefe de la Nación, el que en sus manos significó la verdadera República, el poder de la ley- deja un sombrero, un par de charreteras y una espada. No deja más: no tiene otros bienes».
Militar y político venezolano, Carlos Soublette nace en La Guaira, el 15 de diciembre de 1789.
Desde muy temprana edad, como era costumbre en su época, se une a las tropas independentistas, al lado de Francisco de Miranda, como portaestandarte.
Más adelante, se une a Simón Bolívar en la expedición de Los Cayos. En el oriente de Venezuela, participa en muchas acciones militares y se bate con heroicidad en Nueva Granada. Su brillante, actuación le hace merecedor del cargo de Director de la Guerra en las Provincias del Centro. Realiza entonces una campaña contra los realistas que se habían refugiado en Coro y Maracaibo.
Ejerce la vicepresidencia de la República y es designado por el Gobierno nacional para arreglar con España un tratado de reconocimiento de la Independencia.Soublette también llega a ejercer funciones como Intendente del Magdalena.
En 1829, firma el acta de separación de Venezuela de la Gran Colombia y participa activamente en la política del naciente Estado venezolano.
Termina el período presidencial de José María Vargas, después de la renuncia de éste, el 20 de mayo de 1837, cuando habiendo sido electo Vicepresidente el General Carlos Soublette, asumió la Presidencia y la ejerció como encargado hasta que terminó el período en 1839. Posteriormente, es electo Presidente Constitucional para el período 1843-1847, cargo desde el cual realiza una destacada labor.
De su mandato se dice que: “marca uno de los períodos más felices y fructíferos de la historia de Venezuela”.
Como homenaje póstumo a este servidor de la Patria, el señor Felipe Santiago Casanova escribió: «Hoy, al pagar su tributo a la naturaleza, después de ochenta años de edad, el soldado en los días de peligro, el Magistrado en el Despacho Administrativo, el Diplomático defendiendo los derechos de su Patria en Europa, el Legislador en muchas de nuestras Asambleas, y el estadista a quien tanto debe esa misma patria, deja por toda fortuna a su familia una noble indigencia y un nombre inmaculado».
Los oficios religiosos se realizaron el día 14 en la Iglesia Metropolitana de donde el cadáver fue trasladado al cementerio de Los Hijos de Dios. El Diario «La Opinión Nacional» completa a necrología:
«Deja un bastón -el que usó cuando fue el Jefe de la Nación, el que en sus manos significó la verdadera República, el poder de la ley- deja un sombrero, un par de charreteras y una espada. No deja más: no tiene otros bienes».
Militar y político venezolano, Carlos Soublette nace en La Guaira, el 15 de diciembre de 1789.
Desde muy temprana edad, como era costumbre en su época, se une a las tropas independentistas, al lado de Francisco de Miranda, como portaestandarte.
Más adelante, se une a Simón Bolívar en la expedición de Los Cayos. En el oriente de Venezuela, participa en muchas acciones militares y se bate con heroicidad en Nueva Granada. Su brillante, actuación le hace merecedor del cargo de Director de la Guerra en las Provincias del Centro. Realiza entonces una campaña contra los realistas que se habían refugiado en Coro y Maracaibo.
Ejerce la vicepresidencia de la República y es designado por el Gobierno nacional para arreglar con España un tratado de reconocimiento de la Independencia.Soublette también llega a ejercer funciones como Intendente del Magdalena.
En 1829, firma el acta de separación de Venezuela de la Gran Colombia y participa activamente en la política del naciente Estado venezolano.
Termina el período presidencial de José María Vargas, después de la renuncia de éste, el 20 de mayo de 1837, cuando habiendo sido electo Vicepresidente el General Carlos Soublette, asumió la Presidencia y la ejerció como encargado hasta que terminó el período en 1839. Posteriormente, es electo Presidente Constitucional para el período 1843-1847, cargo desde el cual realiza una destacada labor.
De su mandato se dice que: “marca uno de los períodos más felices y fructíferos de la historia de Venezuela”.
12 de Febrero: Batalla de La Victoria – Día de la Juventud
Se
celebra en esta fecha el Día de la Juventud venezolana, en
conmemoración de la Batalla de La Victoria, ganada ejemplarmente en 1814
por José Félix Ribas con jóvenes del Seminario y de la Universidad de
Caracas.
El 10 de febrero de 1947 la Asamblea Constituyente decreta que se celebre el 12 de febrero como el Día de la Juventud en Venezuela «en reconocimiento a los servicios hechos a la república por los jóvenes».
En todo el país se llevan a cabo actos conmemorativos del Día de la Juventud, pero los actos centrales de este día se realizan en la ciudad de La Victoria, en la plaza principal que lleva el nombre del héroe José Félix Ribas y donde existe el grupo escultórico integrado por el héroe y varios jóvenes que reciben instrucciones sobre el manejo del fusil.
Este monumento lo decretó el Presidente Andueza Palacio, pero se vino a erigir durante el gobierno de Joaquín Crespo, inaugurándose el 13 de febrero de 1895. El escultor fue Eloy Palacios.
Como un estímulo a la juventud creadora de Venezuela, el Ministerio de la Familia otorga ese día la condecoración «José Félix Ribas» a los jóvenes que se han destacado en el año en diferentes áreas. [Leer: “Los jóvenes mártires de La Victoria”]
El 10 de febrero de 1947 la Asamblea Constituyente decreta que se celebre el 12 de febrero como el Día de la Juventud en Venezuela «en reconocimiento a los servicios hechos a la república por los jóvenes».
En todo el país se llevan a cabo actos conmemorativos del Día de la Juventud, pero los actos centrales de este día se realizan en la ciudad de La Victoria, en la plaza principal que lleva el nombre del héroe José Félix Ribas y donde existe el grupo escultórico integrado por el héroe y varios jóvenes que reciben instrucciones sobre el manejo del fusil.
Este monumento lo decretó el Presidente Andueza Palacio, pero se vino a erigir durante el gobierno de Joaquín Crespo, inaugurándose el 13 de febrero de 1895. El escultor fue Eloy Palacios.
Como un estímulo a la juventud creadora de Venezuela, el Ministerio de la Familia otorga ese día la condecoración «José Félix Ribas» a los jóvenes que se han destacado en el año en diferentes áreas. [Leer: “Los jóvenes mártires de La Victoria”]
12 de Febrero de 1818: Batalla de Calabozo
El 12 de febrero de 1818, Bolívar y Páez
con un ejército unido de 3.500 soldados, cayeron por sorpresa sobre
Calabozo, donde estaba atrincherado el general Pablo Morillo.
En lo más enconado de la acción, Morillo utilizó los últimos recursos ordenando a tres compañías del Batallón Navarra que auxiliaran a los compañeros maltrechos, pero la caballería de Páez las destrozó, ganando la batalla.
El jefe realista, con su golpeado ejército queda reducido a la ciudad de Calabozo. Bolívar ordenó poner sitio a la ciudad y ofreció indulto a Morillo, quien terminó evacuando Calabozo dos días más tarde y se trasladó a El Sombrero.
La Batalla de Calabozo, dada este día, fue desastrosa para el jefe realista, que perdió casi toda la caballería y uno a uno a los valientes de la infantería.
En lo más enconado de la acción, Morillo utilizó los últimos recursos ordenando a tres compañías del Batallón Navarra que auxiliaran a los compañeros maltrechos, pero la caballería de Páez las destrozó, ganando la batalla.
El jefe realista, con su golpeado ejército queda reducido a la ciudad de Calabozo. Bolívar ordenó poner sitio a la ciudad y ofreció indulto a Morillo, quien terminó evacuando Calabozo dos días más tarde y se trasladó a El Sombrero.
La Batalla de Calabozo, dada este día, fue desastrosa para el jefe realista, que perdió casi toda la caballería y uno a uno a los valientes de la infantería.
12 de Febrero de 1638: Fundación de Barcelona
El
12 de febrero de 1638, Juan de Orpín, también conocido como Juan de
Orpín, por su condición de catalán funda a orillas del Neverí,
precisamente el día de su cumpleaños, la ciudad de Nueva Barcelona del
Cerro Santo o Santa Eulalia de Barcelona, en homenaje a la capital de su
provincia de Cataluña.
Orpín murió en la ciudad de Barcelona fundada por él, a los 53 años de edad, el 1 de julio de 1645. La ciudad de Nueva Barcelona del Cerro Santo, más tarde (1 de enero de 1671) es trasladada por Sancho Fernández de Angulo al sitio que ocupa actualmente, reduciendo su nombre al de Barcelona.
Orpín murió en la ciudad de Barcelona fundada por él, a los 53 años de edad, el 1 de julio de 1645. La ciudad de Nueva Barcelona del Cerro Santo, más tarde (1 de enero de 1671) es trasladada por Sancho Fernández de Angulo al sitio que ocupa actualmente, reduciendo su nombre al de Barcelona.
13 de Febrero de 1814: Ejecución de los recluidos en La Guaira
El
13 de febrero de 1814 el Comandante de La Guaira, Leandro Palacios,
oficia al Libertador comunicándole que «en obediencia a la orden expresa
del Excmo. señor General Libertador, para que sean decapitados todos
los presos españoles y canarios reclusos en las bóvedas de este Puerto,
se ha comenzado la ejecución pasándose por las armas esta noche a cien
de ellos».
Juan Bautista Arismendi comunica después a Bolívar que se han cumplido sus órdenes, ejecutando unos 800 presos.
Bolívar da la terrible orden de pasar por las armas a todos los españoles presos en las bóvedas y en el hospital de La Guaira el 8 de febrero de 1814, en el doloroso cumplimiento de lo que fue la Guerra a Muerte. La comunicación iba dirigida al Comandante de esa plaza, José Leandro Palacios, quien le acababa de informar al Libertador que los presos eran muchos y, estando con poca guarnición la plaza a su mando, se le hacía crítica la situación. Al Arzobispo Narciso Coll y Prat, que intercede por los presos, le contesta Bolívar:«No menos que a V.S. Illma. me es doloroso este sacrificio. La salud de mi patria que lo exige tan imperiosamente podría sólo obligarme a esta determinación. Si yo no viera que en este caso la indulgencia aumentaría el número de las víctimas, y frustraría los mismos sentimientos de piedad que mueven a V. S. Illma. a interceder, yo me apresuraría a darle en esta ocasión un testimonio de mi deseo de complacerle. Mas vea V. S. Illma. la dura necesidad en que nos ponen nuestros crueles enemigos … ¿Qué utilidad hemos sacado hasta ahora de conservar a sus prisioneros y aun de dar la libertad a una gran parte de ellos? Se ha conseguido que ayer en el Tinaquillo hayan entrado y asesinado veinte y cinco hombres que le guarnecían, sin perdonar uno solo; que Boves no haya dado todavía cuartel ni a uno de los prisioneros que nos ha hecho. Asómbrese más, V.S. Illma, al saber que Boves sacrifica indistintamente hombres y mujeres. No sólo por vengar a mi patria, sino por contener el torrente de sus destructores, estoy obligado a la severa medida que V. S. Illma. ha sabido. Uno menos que exista de tales monstruos es uno menos que ha inmolado e inmolaría centenares de víctimas…
Juan Bautista Arismendi comunica después a Bolívar que se han cumplido sus órdenes, ejecutando unos 800 presos.
Bolívar da la terrible orden de pasar por las armas a todos los españoles presos en las bóvedas y en el hospital de La Guaira el 8 de febrero de 1814, en el doloroso cumplimiento de lo que fue la Guerra a Muerte. La comunicación iba dirigida al Comandante de esa plaza, José Leandro Palacios, quien le acababa de informar al Libertador que los presos eran muchos y, estando con poca guarnición la plaza a su mando, se le hacía crítica la situación. Al Arzobispo Narciso Coll y Prat, que intercede por los presos, le contesta Bolívar:«No menos que a V.S. Illma. me es doloroso este sacrificio. La salud de mi patria que lo exige tan imperiosamente podría sólo obligarme a esta determinación. Si yo no viera que en este caso la indulgencia aumentaría el número de las víctimas, y frustraría los mismos sentimientos de piedad que mueven a V. S. Illma. a interceder, yo me apresuraría a darle en esta ocasión un testimonio de mi deseo de complacerle. Mas vea V. S. Illma. la dura necesidad en que nos ponen nuestros crueles enemigos … ¿Qué utilidad hemos sacado hasta ahora de conservar a sus prisioneros y aun de dar la libertad a una gran parte de ellos? Se ha conseguido que ayer en el Tinaquillo hayan entrado y asesinado veinte y cinco hombres que le guarnecían, sin perdonar uno solo; que Boves no haya dado todavía cuartel ni a uno de los prisioneros que nos ha hecho. Asómbrese más, V.S. Illma, al saber que Boves sacrifica indistintamente hombres y mujeres. No sólo por vengar a mi patria, sino por contener el torrente de sus destructores, estoy obligado a la severa medida que V. S. Illma. ha sabido. Uno menos que exista de tales monstruos es uno menos que ha inmolado e inmolaría centenares de víctimas…
13 de Febrero de 1877: Venezuela pierde el Esequibo
El
13 de febrero de 1877, para tratar sobre el ya demorado asunto de los
límites con la Guayana Británica, el doctor José María Rojas, Ministro
residente de Venezuela ante el gobierno de Gran Bretaña, escribe una
nota al Conde de Derby, planteándole la conveniencia de concertar un
tratado de límites en base al río Esequibo, que desde la división de la
Provincia de Guayana por el Reino de España, pertenece a Venezuela.
Sugiere la idea de fijar una línea convencional, «para prevenir serias dificultades en el futuro, especialmente porque la Guayana está atrayendo la atención general del mundo, a causa de las inmensas riquezas que se descubren allí diariamente», afirmaba Rojas ya en esa época.
El Ministro de Relaciones Exteriores, Raimundo Andueza Palacio, desaprueba una frase de dicha nota, en la que Rojas dice: «el Gobierno (de Venezuela) no intenta mantener la pretensión de llegar hasta el Esequibo».
Esta actitud, como otras muchas posteriores, ha impedido que se tome legítima posesión de unos 150.000 kilómetros cuadrados que son venezolanos.
Sugiere la idea de fijar una línea convencional, «para prevenir serias dificultades en el futuro, especialmente porque la Guayana está atrayendo la atención general del mundo, a causa de las inmensas riquezas que se descubren allí diariamente», afirmaba Rojas ya en esa época.
El Ministro de Relaciones Exteriores, Raimundo Andueza Palacio, desaprueba una frase de dicha nota, en la que Rojas dice: «el Gobierno (de Venezuela) no intenta mantener la pretensión de llegar hasta el Esequibo».
Esta actitud, como otras muchas posteriores, ha impedido que se tome legítima posesión de unos 150.000 kilómetros cuadrados que son venezolanos.
14 de Febrero de 1803: Nacimiento de Valentín Espinal
Valentín Espinal, hombre público de
limpia trayectoria, nace en Caracas, el 14 de febrero de 1803. Se inició
en la actividad pública, siendo todavía muy joven. Asistió a la
Convención de Ocaña en 1828 y también como Diputado a la Convención de
Valencia, en la que se comportó como «el más discreto».
Pedro Grases define a Espinal como «el primer gran impresor venezolano de la República…» pues, desde la edad de 12 años ingresa en la imprenta de Juan Gutiérrez Díaz, en Caracas, quien, al abandonar el país por estar incluido en el decreto de expulsión de los españoles desafectos a la república, deja a Valentín Espinal al frente del taller, que años más tarde convertiría en taller escuela para la formación de artesanos venezolanos en el arte de imprimir.
En 1835 apoyó la candidatura de José María Vargas y en 1840 figura entre los fundadores del Partido Liberal. Al estallar la Guerra Federal escribe sus reflexiones sobre el doloroso derramamiento de sangre sin sentido, lo que hace que sea expulsado del país por orden del ministro Angel Quintero. Regresa a Venezuela en 1863 y muere en Caracas el 23 de noviembre de 1866.
Pedro Grases define a Espinal como «el primer gran impresor venezolano de la República…» pues, desde la edad de 12 años ingresa en la imprenta de Juan Gutiérrez Díaz, en Caracas, quien, al abandonar el país por estar incluido en el decreto de expulsión de los españoles desafectos a la república, deja a Valentín Espinal al frente del taller, que años más tarde convertiría en taller escuela para la formación de artesanos venezolanos en el arte de imprimir.
En 1835 apoyó la candidatura de José María Vargas y en 1840 figura entre los fundadores del Partido Liberal. Al estallar la Guerra Federal escribe sus reflexiones sobre el doloroso derramamiento de sangre sin sentido, lo que hace que sea expulsado del país por orden del ministro Angel Quintero. Regresa a Venezuela en 1863 y muere en Caracas el 23 de noviembre de 1866.
14 de Febrero de 1936: La manifestación del 14 de febrero de 1936
Tras
diversos tipos de presión pública y manifestaciones estudiantiles, el
Presidente López Contreras se ve forzado a liquidar el «gomecismo» que
aún imperaba en su recién fundado gobierno.
No obstante, no pudieron evitarse las víctimas de este día, cuando la policía disparó desde los balcones de la Gobernación contra el pueblo congregado en la Plaza Bolívar de Caracas.
Esta actitud enardeció más a la población caraqueña, que duplicó su oposición al régimen. López Contreras había hecho célebre la frase «calma y cordura», con la que pretendía mitigar las manifestaciones violentas. En virtud de que éstas no cesaban, el Presidente decreta la suspensión de garantías constitucionales, al tiempo que el Gobernador del Distrito Federal Félix Galavís, prohibía la propaganda comunista y las reuniones de más de tres personas.
Así llegamos al 14 de febrero de 1936. La manifestación encabezada por el rector de la Universidad, Francisco Antonio Rísquez, fue considerada entonces como «la manifestación cívica más importante jamás efectuada en nuestro país». López promete restituir las garantías, y sustituye al Gobernador Galavís por Elbano Mibelli. Igualmente, los funcionarios tenidos como destacados gomecistas fueron destituidos. El día 21 López Contreras presentó lo que se llamó el Programa de Febrero.
No obstante, no pudieron evitarse las víctimas de este día, cuando la policía disparó desde los balcones de la Gobernación contra el pueblo congregado en la Plaza Bolívar de Caracas.
Esta actitud enardeció más a la población caraqueña, que duplicó su oposición al régimen. López Contreras había hecho célebre la frase «calma y cordura», con la que pretendía mitigar las manifestaciones violentas. En virtud de que éstas no cesaban, el Presidente decreta la suspensión de garantías constitucionales, al tiempo que el Gobernador del Distrito Federal Félix Galavís, prohibía la propaganda comunista y las reuniones de más de tres personas.
Así llegamos al 14 de febrero de 1936. La manifestación encabezada por el rector de la Universidad, Francisco Antonio Rísquez, fue considerada entonces como «la manifestación cívica más importante jamás efectuada en nuestro país». López promete restituir las garantías, y sustituye al Gobernador Galavís por Elbano Mibelli. Igualmente, los funcionarios tenidos como destacados gomecistas fueron destituidos. El día 21 López Contreras presentó lo que se llamó el Programa de Febrero.
14 de Febrero: Día de San Valentín
La
historia del día de San Valentín comienza en el siglo tercero con un
tirano emperador romano y un humilde mártir cristiano. El emperador era
Claudio III. El cristiano era Valentino. Claudio había ordenado a todos
los cristianos adorar a doce dioses, y había declarado que asociarse con
cristianos era un crimen castigado con la pena de muerte.
Valentino se había dedicado a los ideales de Cristo y ni siquiera las amenazas de muerte le detenían de practicar sus creencias. Valentino fué arrestado y enviado a prisión. Durante las últimas semanas de su vida, algo impresionante sucedió. El carcelero, habiendo visto que Valentino era un hombre de letras, pidió permiso para traer a su hija, Julia, a recibir lecciones de Valentino. Julia había sido ciega desde su nacimiento. Valentino le leyó cuentos de la historia romana, le enseñó aritmética y le habló de Dios.
Julia todos los días rezaba y pedía porque pudiera ver. Un día se sentaron juntos, cada uno en oración. De pronto, una luz brillante iluminó la celda de la prisión. Radiante, Julia exclamó, ‘¡Valentino, puedo ver, puedo ver!’ ‘¡Gloria a Dios!’ exclamó Valentino.
En la víspera de su muerte, Valentino le escribió una última carta a Julia pidiéndole que se mantuviera cerca de Dios y la firmó ‘De Tu Valentino’.
Valentino fue ejecutado el día siguiente, el 14 de febrero del año 270, cerca de una puerta que más tarde fuera nombrada Puerta de Valentino para honrar su memoria. Cuenta la leyenda que Julia plantó un Almendro de flores rosadas junto a su tumba. Hoy, el árbol de almendras es un símbolo de amor y amistad duraderos. En cada 14 de febrero, el día de San Valentín, mensajes de afecto, amor y devoción son intercambiados alrededor del mundo.
Valentino se había dedicado a los ideales de Cristo y ni siquiera las amenazas de muerte le detenían de practicar sus creencias. Valentino fué arrestado y enviado a prisión. Durante las últimas semanas de su vida, algo impresionante sucedió. El carcelero, habiendo visto que Valentino era un hombre de letras, pidió permiso para traer a su hija, Julia, a recibir lecciones de Valentino. Julia había sido ciega desde su nacimiento. Valentino le leyó cuentos de la historia romana, le enseñó aritmética y le habló de Dios.
Julia todos los días rezaba y pedía porque pudiera ver. Un día se sentaron juntos, cada uno en oración. De pronto, una luz brillante iluminó la celda de la prisión. Radiante, Julia exclamó, ‘¡Valentino, puedo ver, puedo ver!’ ‘¡Gloria a Dios!’ exclamó Valentino.
En la víspera de su muerte, Valentino le escribió una última carta a Julia pidiéndole que se mantuviera cerca de Dios y la firmó ‘De Tu Valentino’.
Valentino fue ejecutado el día siguiente, el 14 de febrero del año 270, cerca de una puerta que más tarde fuera nombrada Puerta de Valentino para honrar su memoria. Cuenta la leyenda que Julia plantó un Almendro de flores rosadas junto a su tumba. Hoy, el árbol de almendras es un símbolo de amor y amistad duraderos. En cada 14 de febrero, el día de San Valentín, mensajes de afecto, amor y devoción son intercambiados alrededor del mundo.
15 de Febrero de 1819: El Congreso de Angostura
El
acto reviste la mayor solemnidad. Ante 26 de los 30 diputados electos,
ante distinguidas personalidades invitadas, el 15 de febrero de 1819 se
instala el Congreso de Angostura con un discurso medular de Simón
Bolívar, Jefe Supremo de la República desde 1816.
Francisco Antonio Zea es electo Presidente del Congreso, y éste, ya en posesión, invita a tomar la elección de un Presidente de la República interino. Como era de esperarse, el elegido es Simón Bolívar. Al Libertador, sin embargo, le preocupa más la guerra que la Presidencia. Pide, por tanto, que se le acepte la renuncia:
«Legisladores: Yo deposito en vuestras manos el mando supremo de Venezuela. Vuestro es ahora el augusto deber de consagraros a la felicidad de la República; en vuestras manos está la balanza de nuestros destinos, la medida de nuestra gloria; ellas sellarán los decretos que fijan nuestra libertad…. »
Las discusiones duran dos días. Los diputados insisten en que Bolívar debe ser el Presidente interino. El día 17 de febrero aceptó y juró obediencia al Soberano Congreso.
El discurso de Bolívar en Angostura está lleno de sabias reflexiones, de un insuperable contenido político y filosófico. Es difícil concebir que pieza tan sesuda pudo haber sido creada en medio del estruendo de la guerra, los viajes a caballo, en embarcaciones, los sacrificios, las intrigas de los mismos conciudadanos. Es el poder de concentración lo que asombra de Bolívar, demostrado cuando dictaba hasta tres y cuatro cartas a la vez.
En Angostura, Bolívar es sociólogo, filósofo, historiador, visionario, nos muestra lo que ha asimilado de los clásicos antiguos y modernos, es esencialmente un político creador. Cuando nos habla del Poder Moral, su cuarto Poder, pone de manifiesto la sensibilidad de su alma y su preocupación por la educación del pueblo: «La educación popular debe ser el cuidado primogénito del amor paternal del Congreso. Moral y luces son los polos de una República; moral y luces son nuestras primeras necesidades …»
Bolívar se pronuncia también por un Gobierno republicano, cuyas bases serían «la soberanía del pueblo; la división de los poderes; la libertad civil, la proscripción de la esclavitud, la abolición de la monarquía y los privilegios».
Este discurso de Angostura tiene unas cinco mil palabras. Bolívar le encomendó a Manuel Palacio Fajardo que le hiciera las observaciones que creyera convenientes. Apenas pronunciado en el recinto del Congreso, Bolívar lo entregó al súbdito británico James Hamilton, comerciante residenciado en Angostura, para que lo tradujera al inglés. Este manuscrito, escrito por ambas caras en un cuaderno de 32 folios, permaneció en manos de los familiares de Hamilton, hasta que fue rescatado por Pedro Grases en 1975 y publicado en reproducción facsimilar que ordenó el entonces Presidente Carlos Andrés Pérez.
Simón Bolívar Presidente de Venezuela
A dos días de haberse instalado el célebre Congreso de Angostura, el 17 de febrero de 1819, Simón Bolívar se juramento como Presidente de Venezuela. A partir de ese momento aparece en los documentos oficiales la denominación «Libertador Presidente de la República de Venezuela», hasta el 17 de diciembre de este mismo año, en que pasa a ser Presidente de la nueva República de Colombia que él mismo ha creado.
Francisco Antonio Zea es electo Presidente del Congreso, y éste, ya en posesión, invita a tomar la elección de un Presidente de la República interino. Como era de esperarse, el elegido es Simón Bolívar. Al Libertador, sin embargo, le preocupa más la guerra que la Presidencia. Pide, por tanto, que se le acepte la renuncia:
«Legisladores: Yo deposito en vuestras manos el mando supremo de Venezuela. Vuestro es ahora el augusto deber de consagraros a la felicidad de la República; en vuestras manos está la balanza de nuestros destinos, la medida de nuestra gloria; ellas sellarán los decretos que fijan nuestra libertad…. »
Las discusiones duran dos días. Los diputados insisten en que Bolívar debe ser el Presidente interino. El día 17 de febrero aceptó y juró obediencia al Soberano Congreso.
El discurso de Bolívar en Angostura está lleno de sabias reflexiones, de un insuperable contenido político y filosófico. Es difícil concebir que pieza tan sesuda pudo haber sido creada en medio del estruendo de la guerra, los viajes a caballo, en embarcaciones, los sacrificios, las intrigas de los mismos conciudadanos. Es el poder de concentración lo que asombra de Bolívar, demostrado cuando dictaba hasta tres y cuatro cartas a la vez.
En Angostura, Bolívar es sociólogo, filósofo, historiador, visionario, nos muestra lo que ha asimilado de los clásicos antiguos y modernos, es esencialmente un político creador. Cuando nos habla del Poder Moral, su cuarto Poder, pone de manifiesto la sensibilidad de su alma y su preocupación por la educación del pueblo: «La educación popular debe ser el cuidado primogénito del amor paternal del Congreso. Moral y luces son los polos de una República; moral y luces son nuestras primeras necesidades …»
Bolívar se pronuncia también por un Gobierno republicano, cuyas bases serían «la soberanía del pueblo; la división de los poderes; la libertad civil, la proscripción de la esclavitud, la abolición de la monarquía y los privilegios».
Este discurso de Angostura tiene unas cinco mil palabras. Bolívar le encomendó a Manuel Palacio Fajardo que le hiciera las observaciones que creyera convenientes. Apenas pronunciado en el recinto del Congreso, Bolívar lo entregó al súbdito británico James Hamilton, comerciante residenciado en Angostura, para que lo tradujera al inglés. Este manuscrito, escrito por ambas caras en un cuaderno de 32 folios, permaneció en manos de los familiares de Hamilton, hasta que fue rescatado por Pedro Grases en 1975 y publicado en reproducción facsimilar que ordenó el entonces Presidente Carlos Andrés Pérez.
Simón Bolívar Presidente de Venezuela
A dos días de haberse instalado el célebre Congreso de Angostura, el 17 de febrero de 1819, Simón Bolívar se juramento como Presidente de Venezuela. A partir de ese momento aparece en los documentos oficiales la denominación «Libertador Presidente de la República de Venezuela», hasta el 17 de diciembre de este mismo año, en que pasa a ser Presidente de la nueva República de Colombia que él mismo ha creado.
16 de Febrero de 1816: Paéz vence en Mata de Miel
El
16 de febrero de 1816, José Antonio Páez, con sólo 300 hombres de
caballería, vence a 1.600 realistas en el sitio denominada La Mata de la
Miel.
Esta primera gran victoria de Páez, joven aún dejó en poder de los patriotas unos 500 prisioneros, arma y municiones y más de 3.345 caballos, indispensables para el llanero.
Es en esta acción donde Páez -según narra en su autobiografía- sin darse cuenta se acercó demasiado al enemigo, quien comenzó a disparar, hiriendo mortalmente a su caballo, a lo cual «tomando entonces uno de los dragones, me reuní con mis tropas, a quienes (lo recuerdo como si fuera hoy) les dirigí la más estupenda proclama que jamás ocurrió a general alguno.
-Compañeros, les dije, me han matado mi buen caballo, y si ustedes no están resueltos a vengar ahora mismo su muerte yo me lanzaré solo a perecer entre las filas enemigas. Todos contestaron «Sí, la vengaremos».
Por esta importante acción, el gobierno de Nueva Granada le concede el grado de Comandante. El historiador J.A. Cova afirma que «después del combate de «Mata de la Miel», Páez se crece como caudillo de los llaneros. Es su jefe indiscutible y entre ellos manda y gobierna con la omnipotencia de un sultán. Ha dejado atrás a todos los que fueron sus primeros compañeros de armas: Nonato Pérez, Genaro Vásquez, Antonio Figueredo… Su guerra es típica y original, y su «gente» son «montoneras», que forman, no una tribu bárbara en marcha».
Esta primera gran victoria de Páez, joven aún dejó en poder de los patriotas unos 500 prisioneros, arma y municiones y más de 3.345 caballos, indispensables para el llanero.
Es en esta acción donde Páez -según narra en su autobiografía- sin darse cuenta se acercó demasiado al enemigo, quien comenzó a disparar, hiriendo mortalmente a su caballo, a lo cual «tomando entonces uno de los dragones, me reuní con mis tropas, a quienes (lo recuerdo como si fuera hoy) les dirigí la más estupenda proclama que jamás ocurrió a general alguno.
-Compañeros, les dije, me han matado mi buen caballo, y si ustedes no están resueltos a vengar ahora mismo su muerte yo me lanzaré solo a perecer entre las filas enemigas. Todos contestaron «Sí, la vengaremos».
Por esta importante acción, el gobierno de Nueva Granada le concede el grado de Comandante. El historiador J.A. Cova afirma que «después del combate de «Mata de la Miel», Páez se crece como caudillo de los llaneros. Es su jefe indiscutible y entre ellos manda y gobierna con la omnipotencia de un sultán. Ha dejado atrás a todos los que fueron sus primeros compañeros de armas: Nonato Pérez, Genaro Vásquez, Antonio Figueredo… Su guerra es típica y original, y su «gente» son «montoneras», que forman, no una tribu bárbara en marcha».
16 de Febrero de 1823: Nace Juan Bautista Dalla-Costa
El 16 de febrero de 1823 nace en Ciudad
Bolívar Juan Bautista Dalla-Costa Soublette, «el hombre más notable que
tuvo Guayana en la segunda mitad del siglo XIX», según Héctor García
Chuecos.
Se le llama Dalla-Costa, hijo, para diferenciarlo de su padre Juan Bautista Dalla-Costa, comerciante genovés que llega a Venezuela en el año de 1814, activo contribuyente, con recursos económicos, a la causa republicana.
Dalla-Costa, hijo, fue un gran estudioso. A los conocimientos que adquirió en las aulas de la ciudad nativa se agregaron los que obtuvo en sus prolongados viajes por casi todo el mundo.
En 1863 fue nombrado Gobernador de Guayana, hasta que el avance de la Revolución Federal le hizo abandonar el cargo. Tres años más tarde ejerció el mismo destino. Fue durante este período cuando abrió una contribución pública para levantar la estatua de Simón Bolívar en la Plaza de Angostura. Esta estatua, inaugurada en 1869, es la más antigua de las existentes en el país.
Cuando llegó al poder Guzmán Blanco en 1870, los favorecedores del Ilustre Americano derrocaron a Dalla-Costa; pero el propio Guzmán, sabedor de las cualidades del guayanés insigne, lo nombró Ministro Plenipotenciario en Washington, en 1874. De allí regresó para ocuparse nuevamente de la Gobernación de Guayana.
Dalla-Costa se adelantó, en casi dos años, al famoso decreto de Guzmán Blanco sobre educación pública, gratuita y obligatoria. Sus indiscutibles méritos lo llevaron, aunque sin éxito, a ser candidato a la Presidencia de la República.
Murió en Ciudad Bolívar, el 10 de febrero de 1894 el ilustre guayanés quien fuera Presidente progresista del hoy estado Bolívar.
Se le llama Dalla-Costa, hijo, para diferenciarlo de su padre Juan Bautista Dalla-Costa, comerciante genovés que llega a Venezuela en el año de 1814, activo contribuyente, con recursos económicos, a la causa republicana.
Dalla-Costa, hijo, fue un gran estudioso. A los conocimientos que adquirió en las aulas de la ciudad nativa se agregaron los que obtuvo en sus prolongados viajes por casi todo el mundo.
En 1863 fue nombrado Gobernador de Guayana, hasta que el avance de la Revolución Federal le hizo abandonar el cargo. Tres años más tarde ejerció el mismo destino. Fue durante este período cuando abrió una contribución pública para levantar la estatua de Simón Bolívar en la Plaza de Angostura. Esta estatua, inaugurada en 1869, es la más antigua de las existentes en el país.
Cuando llegó al poder Guzmán Blanco en 1870, los favorecedores del Ilustre Americano derrocaron a Dalla-Costa; pero el propio Guzmán, sabedor de las cualidades del guayanés insigne, lo nombró Ministro Plenipotenciario en Washington, en 1874. De allí regresó para ocuparse nuevamente de la Gobernación de Guayana.
Dalla-Costa se adelantó, en casi dos años, al famoso decreto de Guzmán Blanco sobre educación pública, gratuita y obligatoria. Sus indiscutibles méritos lo llevaron, aunque sin éxito, a ser candidato a la Presidencia de la República.
Murió en Ciudad Bolívar, el 10 de febrero de 1894 el ilustre guayanés quien fuera Presidente progresista del hoy estado Bolívar.
17 de Febrero de 1860: Batalla de Coplé
Durante
la encarnizada guerra federal, el 17 de febrero de 1860 se libra en la
laguna de Coplé (Guárico) la batalla del mismo nombre, entre las fuerzas
de Juan Crisóstomo Falcón, que había sustituido a Zamora, y las
constitucionales de León de Febres Cordero. En esta batalla quedó
destruido el ejército federal.
Coplé es la segunda de las dos grandes batallas por la Federación. La primera, la de Santa Inés, resultó una victoria para las tropas federales. Coplé fue un desastre, quizás porque estaba vivo el dolor producido por la muerte de Zamora. Sin embargo, la recuperación de los federalistas fue notoria, hasta el punto de triunfar e imponer gobierno, constitución y sistema.
Coplé es la segunda de las dos grandes batallas por la Federación. La primera, la de Santa Inés, resultó una victoria para las tropas federales. Coplé fue un desastre, quizás porque estaba vivo el dolor producido por la muerte de Zamora. Sin embargo, la recuperación de los federalistas fue notoria, hasta el punto de triunfar e imponer gobierno, constitución y sistema.
17 de Febrero de 1925: Muere Ignacio Andrade
El
17 de febrero de 1925 muere en Macuto, Litoral Central, Ignacio
Andrade, militar, político y Presidente de la República (1898-1899). Se
sospecha que nació en Mérida en diciembre de 1836. No ha aparecido su
partida de bautismo.
Cuando el célebre «Mocho» Hernández presentó su candidatura a la Presidencia de la República, en 1897, fue derrotado por el candidato oficialista por un gran margen. Mientras el General Hernández obtenía 2.203 votos, el General Ignacio Andrade sacaba 406.610, incluido el voto de su favorecedor, el Presidente Joaquín Crespo. Los resultados fueron considerados como el primer gran fraude político que se comete en Venezuela.
Con la vida pagará Crespo este apoyo, ya que el «Mocho» Hernández, alzado, va a despertar las iras presidenciales y es el propio Crespo quien sale a perseguirlo, con tan mala suerte, que cuando lo encuentra en Mata Carmelera (Cojedes), un tiro extraviado le apaga el corazón al expresidente, el 16 de abril de 1898.
A Ignacio Andrade le corresponde un período constitucional de cuatro años: 1898-1902. Se posesionó el 20 de febrero de 1898, pero Cipriano Castro, al frente de su Revolución Liberal Restauradora, lo tumbó el 19 de octubre de 1899.
Andrade ha sido, hasta ahora, el único Presidente merideño. Nació supuestamente en la ciudad de Mérida en 1836, hijo de un ilustre prócer de la independencia, el zuliano de los Puertos de Altagracia, José Escolástico Andrade, uno de los héroes de Carabobo, Junín y Ayacucho.
Pero el Presidente Andrade tenía algo de sí mismo. El fracaso de su gobierno no puede achacársele a falta de capacidad ni de honestidad, que ambas las poseyó en alto grado.
Era un verdadero demócrata liberal, hombre trabajador y con la experiencia adquirida en el ejercicio de diversos e importantes empleos públicos: Presidente del Estado Falcón y del Gran Estado Miranda; Senador; Ministro de Educación; y, fiel a su ideal de servicio público, aun después de haber sido Presidente, al regresar del exilio acepta el cargo de Ministro de Relaciones Exteriores bajo el régimen de Juan Vicente Gómez.
El corto período presidencial de Andrade, de menos de veinte meses, se debe atribuir a la situación general del país en confusión, la amenaza constante del caudillismo, la revolución del «Mocho» Hernández, la del General Ramón Guerra, y otras calamidades desatadas por la naturaleza.
El viejo General Andrade, ya de 89 años de edad, murió en Macuto, en plena actividad creadora, según relata la prensa de aquellos días.
El periódico «El Nuevo Diario», de Caracas, le dedica este elogio: «Ha desaparecido un hombre justo, un gran patriota, un ciudadano ilustre y un padre de familia ejemplar». Se dice que Ignacio Andrade trabajó hasta el último día, para aliviar su extrema pobreza, la de su esposa y la de sus siete hijos
Cuando el célebre «Mocho» Hernández presentó su candidatura a la Presidencia de la República, en 1897, fue derrotado por el candidato oficialista por un gran margen. Mientras el General Hernández obtenía 2.203 votos, el General Ignacio Andrade sacaba 406.610, incluido el voto de su favorecedor, el Presidente Joaquín Crespo. Los resultados fueron considerados como el primer gran fraude político que se comete en Venezuela.
Con la vida pagará Crespo este apoyo, ya que el «Mocho» Hernández, alzado, va a despertar las iras presidenciales y es el propio Crespo quien sale a perseguirlo, con tan mala suerte, que cuando lo encuentra en Mata Carmelera (Cojedes), un tiro extraviado le apaga el corazón al expresidente, el 16 de abril de 1898.
A Ignacio Andrade le corresponde un período constitucional de cuatro años: 1898-1902. Se posesionó el 20 de febrero de 1898, pero Cipriano Castro, al frente de su Revolución Liberal Restauradora, lo tumbó el 19 de octubre de 1899.
Andrade ha sido, hasta ahora, el único Presidente merideño. Nació supuestamente en la ciudad de Mérida en 1836, hijo de un ilustre prócer de la independencia, el zuliano de los Puertos de Altagracia, José Escolástico Andrade, uno de los héroes de Carabobo, Junín y Ayacucho.
Pero el Presidente Andrade tenía algo de sí mismo. El fracaso de su gobierno no puede achacársele a falta de capacidad ni de honestidad, que ambas las poseyó en alto grado.
Era un verdadero demócrata liberal, hombre trabajador y con la experiencia adquirida en el ejercicio de diversos e importantes empleos públicos: Presidente del Estado Falcón y del Gran Estado Miranda; Senador; Ministro de Educación; y, fiel a su ideal de servicio público, aun después de haber sido Presidente, al regresar del exilio acepta el cargo de Ministro de Relaciones Exteriores bajo el régimen de Juan Vicente Gómez.
El corto período presidencial de Andrade, de menos de veinte meses, se debe atribuir a la situación general del país en confusión, la amenaza constante del caudillismo, la revolución del «Mocho» Hernández, la del General Ramón Guerra, y otras calamidades desatadas por la naturaleza.
El viejo General Andrade, ya de 89 años de edad, murió en Macuto, en plena actividad creadora, según relata la prensa de aquellos días.
El periódico «El Nuevo Diario», de Caracas, le dedica este elogio: «Ha desaparecido un hombre justo, un gran patriota, un ciudadano ilustre y un padre de familia ejemplar». Se dice que Ignacio Andrade trabajó hasta el último día, para aliviar su extrema pobreza, la de su esposa y la de sus siete hijos
17 de Febrero de 1966: El acuerdo de Ginebra
El 17 de febrero de 1966 se firma el
llamado Acuerdo de Ginebra, entre los Gobiernos de Venezuela y del Reino
Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, en consulta con el Gobierno
de Guayana Británica.
Por dicho acuerdo se creó una comisión mixta «con el encargo de buscar soluciones satisfactorias para el arreglo práctico de la controversia entre Venezuela y el Reino Unido surgida como consecuencia de la contención venezolana de que al laudo arbitral de 1899 sobre la frontera entre Venezuela y la Guayana Británica es nulo e írrito».
Por el artículo IV se establecía un plazo de cuatro años para que la comisión mixta llegara a un acuerdo completo sobre la solución de la controversia; en caso contrario, la misma comisión referiría a los Gobiernos de Venezuela y Guyana en su informe final cualesquiera cuestiones pendientes, y dichos Gobiernos escogerían alguno de los medios de solución pacífica previstos en el artículo V que establece que «con el fin de facilitar la mayor medida posible de cooperación y mutuo entendimiento, nada de lo contenido en este acuerdo será interpretado como una renuncia o disminución por parte de Venezuela, el Reino Unido o la Guayana Británica, de cualesquiera bases de reclamación de soberanía territorial en los territorios de Venezuela o Guayana Británica o de cualesquiera derechos que se hubiesen hecho valer previamente, o de reclamaciones de tales soberanías territoriales o como prejuzgando su posición con respecto a su reconocimiento o no reconocimiento de un derecho a reclamo o base de reclamo por cualquiera de ellos sobre tal soberanía territorial».
Por dicho acuerdo se creó una comisión mixta «con el encargo de buscar soluciones satisfactorias para el arreglo práctico de la controversia entre Venezuela y el Reino Unido surgida como consecuencia de la contención venezolana de que al laudo arbitral de 1899 sobre la frontera entre Venezuela y la Guayana Británica es nulo e írrito».
Por el artículo IV se establecía un plazo de cuatro años para que la comisión mixta llegara a un acuerdo completo sobre la solución de la controversia; en caso contrario, la misma comisión referiría a los Gobiernos de Venezuela y Guyana en su informe final cualesquiera cuestiones pendientes, y dichos Gobiernos escogerían alguno de los medios de solución pacífica previstos en el artículo V que establece que «con el fin de facilitar la mayor medida posible de cooperación y mutuo entendimiento, nada de lo contenido en este acuerdo será interpretado como una renuncia o disminución por parte de Venezuela, el Reino Unido o la Guayana Británica, de cualesquiera bases de reclamación de soberanía territorial en los territorios de Venezuela o Guayana Británica o de cualesquiera derechos que se hubiesen hecho valer previamente, o de reclamaciones de tales soberanías territoriales o como prejuzgando su posición con respecto a su reconocimiento o no reconocimiento de un derecho a reclamo o base de reclamo por cualquiera de ellos sobre tal soberanía territorial».
18 de Febrero de 1924: Nace Humberto Fernández Morán
Médico y científico que inventó el bisturí de diamante. Nació en Maracaibo (Edo. Zulia) el 18 de febrero de 1924.
Cursó estudios primarios en su ciudad natal y en Curazao, en donde vivió a raíz del exilio que tuvo que padecer su padre por estar en desacuerdo con los ideales políticos del presidente del estado Zulia de ese entonces, general Vincencio Pérez Soto. De vuelta al país, después de la muerte del general Juan Vicente Gómez, Fernández Morán continuó sus estudios de bachillerato en el Colegio Alemán de Maracaibo. En 1937, cuando aún no había concluido la secundaria, fue enviado por su padre a Alemania; allí culminó la secundaria en el Instituto Schulgemeinde de Sallfield. A los 16 años ingresó en la Universidad de Munich, donde se graduó Summa Cum Laude de médico a los 21 años.
En 1946 regresó a Venezuela y revalidó su título de médico en la Universidad Central de Venezuela, en donde además cursó un postgrado en Medicina Tropical, el cual no llegó a concluir, pues fue becado por la Universidad de Princeton (Estados Unidos) para especializarse en Neurología. En esa casa de estudios conoció al sabio alemán Albert Einstein, quien le recomendó que continuara sus estudios en Suecia, donde posteriormente Fernández Morán se residenciará y estudiará durante 6 años (1948-1954) física y microscopía electrónica; allí inventó el bisturí de diamante, con lo cual se acreditó el premio John Scott, convirtiéndose así en el primer y único latinoamericano que ha recibido esta distinción. En 1954 regresó a Venezuela y fundó, junto con otros científicos, el Instituto Venezolano de Investigaciones Cerebrales (INVIC, hoy IVIC). Designado director del INVIC, Fernández Morán estableció allí el primer reactor atómico de América Latina y el primer centro científico tecnológico del continente. Logró reunir una comunidad científica interdisciplinaria que, atendiendo problemas de orden nacional y regional, desarrolló programas de formación académica para investigadores. Designado Ministro de Educación en 1957, fue expulsado del país luego del derrocamiento del gobierno del general Marcos Pérez Jiménez (23-1-1958). Se residenció nuevamente en los Estados Unidos, donde ejerció la docencia en la Universidad de Chicago y concibió y desarrolló el Ultramicroscopio Electrónico de Alta Resolución, un aporte realmente trascendental para la ciencia. En esa universidad recibió la alta distinción de profesor vitalicio.
En 1967 recibió la medalla John Scott por su bisturí de diamante y, al año siguiente, al regresar de su vuelo espacial los astronautas del Apolo 11 con muestras del suelo lunar, la NASA le confió el corte de esas muestras con el extraordinario “bisturí” de diamante y lo designó investigador principal en el programa lunar implementado por los Estados Unidos. Los grandes inventos de Fernández Morán han abierto un nuevo camino a la ciencia: la subminiaturización, la penetración de la visión humana al nivel de las moléculas, de los átomos y de los más reducidos cuerpos vitales de tejido humano. Falleció en Estocolmo, Suecia en 16 de marzo de 1999.
Cursó estudios primarios en su ciudad natal y en Curazao, en donde vivió a raíz del exilio que tuvo que padecer su padre por estar en desacuerdo con los ideales políticos del presidente del estado Zulia de ese entonces, general Vincencio Pérez Soto. De vuelta al país, después de la muerte del general Juan Vicente Gómez, Fernández Morán continuó sus estudios de bachillerato en el Colegio Alemán de Maracaibo. En 1937, cuando aún no había concluido la secundaria, fue enviado por su padre a Alemania; allí culminó la secundaria en el Instituto Schulgemeinde de Sallfield. A los 16 años ingresó en la Universidad de Munich, donde se graduó Summa Cum Laude de médico a los 21 años.
En 1946 regresó a Venezuela y revalidó su título de médico en la Universidad Central de Venezuela, en donde además cursó un postgrado en Medicina Tropical, el cual no llegó a concluir, pues fue becado por la Universidad de Princeton (Estados Unidos) para especializarse en Neurología. En esa casa de estudios conoció al sabio alemán Albert Einstein, quien le recomendó que continuara sus estudios en Suecia, donde posteriormente Fernández Morán se residenciará y estudiará durante 6 años (1948-1954) física y microscopía electrónica; allí inventó el bisturí de diamante, con lo cual se acreditó el premio John Scott, convirtiéndose así en el primer y único latinoamericano que ha recibido esta distinción. En 1954 regresó a Venezuela y fundó, junto con otros científicos, el Instituto Venezolano de Investigaciones Cerebrales (INVIC, hoy IVIC). Designado director del INVIC, Fernández Morán estableció allí el primer reactor atómico de América Latina y el primer centro científico tecnológico del continente. Logró reunir una comunidad científica interdisciplinaria que, atendiendo problemas de orden nacional y regional, desarrolló programas de formación académica para investigadores. Designado Ministro de Educación en 1957, fue expulsado del país luego del derrocamiento del gobierno del general Marcos Pérez Jiménez (23-1-1958). Se residenció nuevamente en los Estados Unidos, donde ejerció la docencia en la Universidad de Chicago y concibió y desarrolló el Ultramicroscopio Electrónico de Alta Resolución, un aporte realmente trascendental para la ciencia. En esa universidad recibió la alta distinción de profesor vitalicio.
En 1967 recibió la medalla John Scott por su bisturí de diamante y, al año siguiente, al regresar de su vuelo espacial los astronautas del Apolo 11 con muestras del suelo lunar, la NASA le confió el corte de esas muestras con el extraordinario “bisturí” de diamante y lo designó investigador principal en el programa lunar implementado por los Estados Unidos. Los grandes inventos de Fernández Morán han abierto un nuevo camino a la ciencia: la subminiaturización, la penetración de la visión humana al nivel de las moléculas, de los átomos y de los más reducidos cuerpos vitales de tejido humano. Falleció en Estocolmo, Suecia en 16 de marzo de 1999.
18 de Febrero de 1983: El “Viernes Negro”
Se
conoce con el término de Viernes Negro el viernes 18 de febrero de
1983, porque hasta este día el dólar se cotizaba libremente a 4,30 por
bolívar.
El domingo 20 de febrero el Presidente Luis Herrera Campíns dicta un decreto de suspensión de la venta de divisa extranjera durante los días lunes 21 y martes 22; esta medida fue extendida posteriormente hasta el día 25 de febrero; y el día 22, por decreto presidencial, se establece un control diferencial que permite el cambio de 4,30 bolívares por dólar sólo para los gastos corrientes, envío a estudiantes del exterior, amortización de las deuda pública interna y la privada externa y para las operaciones de la industria petrolera, del hierro y otros renglones.
De esta forma el Banco Central pasa a controlar la compra y venta de divisa extranjera. Podría decirse hoy en día que, de acuerdo a como está el valor del dólar, de viernes negro se pasó a viernes tenebroso, porque para 1996 la divisa norteamericana se situaba oficialmente en 290 bolívares por unidad y en el «mercado negro» rozaba los 500 bolívares, a la par del dólar Brady, que es el que marca la pauta, y hoy, en enero del 2.000 se cotiza a 657,50 bolívares por dólar.
El domingo 20 de febrero el Presidente Luis Herrera Campíns dicta un decreto de suspensión de la venta de divisa extranjera durante los días lunes 21 y martes 22; esta medida fue extendida posteriormente hasta el día 25 de febrero; y el día 22, por decreto presidencial, se establece un control diferencial que permite el cambio de 4,30 bolívares por dólar sólo para los gastos corrientes, envío a estudiantes del exterior, amortización de las deuda pública interna y la privada externa y para las operaciones de la industria petrolera, del hierro y otros renglones.
De esta forma el Banco Central pasa a controlar la compra y venta de divisa extranjera. Podría decirse hoy en día que, de acuerdo a como está el valor del dólar, de viernes negro se pasó a viernes tenebroso, porque para 1996 la divisa norteamericana se situaba oficialmente en 290 bolívares por unidad y en el «mercado negro» rozaba los 500 bolívares, a la par del dólar Brady, que es el que marca la pauta, y hoy, en enero del 2.000 se cotiza a 657,50 bolívares por dólar.
19 de Febrero de 1876: Entrega del Capitolio Federal
Guzmán
Blanco, conocido también como “El Ilustre Americano” decreto el 11 de
octubre de 1872 la construcción del cuerpo sur del Capitolio Federal,
como símbolo de la estabilidad de Venezuela y emblema de la “Revolución
de Abril”. Guzmán Blanco fue conocido por su afán civilizador, marcado
por una notable influencia de las ideas, costumbres y arquitectura
francesa, país al cual admiraba como cuna de la civilización moderna.
Como parte de un plan de gobierno para renovar el país Guzmán Blanco
concibió una serie de obras públicas de importancia; entre las cuales se
cuenta el Capitolio Federal, obra que además posee un valor político e
institucional pues le ha dado sede a los principales poderes y continua
siendo el lugar por excelencia de la vida política de la república.
Por medio de un decreto se ordenó expropiar un solar o terreno del convento de las Hermanas de la Concepción entre las esquinas de La Bolsa y San Francisco, para la construcción del cuerpo sur del Capitolio Federal creándose para tal fin una Junta de Fomento del capitolio a la cual le otorgó poder para administrar e inspeccionar las obras concernientes a tan importante construcción. Juan Röhl y el ingeniero Luciano Urdaneta sobrino del magno prócer de la independencia Rafael Urdaneta acordaron la construcción del edificio por la cantidad de 42.893 bolívares suma esta que sería pronta y enormemente excedida. (171.580 bolívares).
El inicio de los trabajos data del 21 de septiembre de 1872 y los mismos cuentan con la supervisión y dirección de Luciano Urdaneta y sus asistentes los ingenieros Manuel María Urbaneja y Juan Hurtado Manrique. La obra debía ser entregada para el 1ero de febrero de 1873 lo cual les daba poco tiempo a los ingenieros, quienes debieron aplicar métodos militares y novísimas estrategias de subcontratación de empresas y trabajos para ejecutar áreas para lo cual no tenían capacidades. La urgencia de terminar para esa fecha la construcción se debe a que para ese momento se cumplían el XIV aniversario del inicio de la Guerra Federal y se requería de un lugar apropiado que alojase al Primer Congreso surgido de la Revolución de Abril de 1870.
José María Rojas, delegado de la Compañía de Crédito, dirigió el 13 de enero de 1873 una singular proclama que decía, entre otras cosas: «Operarios del Capitolio: Al pie de estas murallas, la ciudad entera os contempla para daros una silba horrorosa, si no acabáis la obra para febrero. Apenas os quedan 30 días hábiles para dar esta batalla … » En lugar de «silba» o rechifla, los obreros recibieron aplausos y fueron condecorados por Guzmán Blanco.
El avance en el ritmo de construcción de la obra fue utilizado como muestra de la eficiencia del régimen de Guzmán Blanco llamado también de “La Regeneración”. Un periódico oficialísta, “La Opinión Nacional” del escritor Nicanor Bolet Peraza comparaba al autócrata; con Pericles, ilustre gobernante ateniense que impulso el desarrollo de la civilización Helena. La construcción fue entregada al gobierno el 19 de febrero de 1873, constituida por una fachada de orden dórico con un cuerpo ático central. El día 27 de febrero de 1873 sesionaron las Cámaras Legislativas siendo elegido Presidente del Senado y del Congreso Antonio Leocadio Guzmán padre de Antonio Guzmán Blanco y de los Diputados el General Jesús María Paúl.
En junio de 1873 se reanudaron los trabajos de construcción del resto de la edificación a cargo del Ing Urdaneta, mientras tanto fue contratado Martín Tovar y Tovar para pintar un retrato al óleo del presidente del cuerpo legislativo y de treinta próceres y ciudadanos ilustres de Venezuela. El 8 de junio Jesús Muñoz Tebar jefe del recién creado Ministerio de Obras Públicas contrata a la empresa británica The Crumlin Works & Co Ltd para la elaboración de la gran fuente central y demás obras de hierro fundido y forjado diseñadas por el Ingeniero Urdaneta y en donde aun se pueden ver las siglas “GB” de Guzmán Blanco.
El 10 de febrero de 1876 se iniciaron los trabajos de cuerpo norte o Palacio Federal estando presidida la compañía esta vez por Henry Lord Boulton, continuando como director el Ingeniero Urdaneta. El conjunto en su totalidad se concluyó el 20 de diciembre de 1877. Pero a pesar de su conclusión se siguió trabajando en el mejoramiento de detalles y ornamentación, así como en lo bulevares adyacentes. El patrimonio del Capitolio Federal se enriqueció con la donación de un cuadro del Libertador del artista peruano José Gil de Castro, con los murales encargados a Martín Tovar y Tovar ” La Batalla de Carabobo”, “La Batalla de Boyacá”, y “La Batalla de Ayacucho”, “El Tríptico Bolivariano” de Tito Salas y el Libro de Actas del Congreso de 1811. Entre 1890 y 1892 el Ingeniero Antonio Malaussena dirigió la colocación de la sobrecúpula traída de los Estados Unidos con el fin de proteger las obras de arte, se instaló la luz eléctrica y por un proyecto del Ingeniero Urdaneta se remodeló el interior del cuerpo sur dándole forma de hemiciclo. El nombre de Capitolio Federal sirve para designar el edificio en su conjunto, sirviendo como sede del Poder Legislativo y símbolo de la institucionalidad democrática en Venezuela.
Por medio de un decreto se ordenó expropiar un solar o terreno del convento de las Hermanas de la Concepción entre las esquinas de La Bolsa y San Francisco, para la construcción del cuerpo sur del Capitolio Federal creándose para tal fin una Junta de Fomento del capitolio a la cual le otorgó poder para administrar e inspeccionar las obras concernientes a tan importante construcción. Juan Röhl y el ingeniero Luciano Urdaneta sobrino del magno prócer de la independencia Rafael Urdaneta acordaron la construcción del edificio por la cantidad de 42.893 bolívares suma esta que sería pronta y enormemente excedida. (171.580 bolívares).
El inicio de los trabajos data del 21 de septiembre de 1872 y los mismos cuentan con la supervisión y dirección de Luciano Urdaneta y sus asistentes los ingenieros Manuel María Urbaneja y Juan Hurtado Manrique. La obra debía ser entregada para el 1ero de febrero de 1873 lo cual les daba poco tiempo a los ingenieros, quienes debieron aplicar métodos militares y novísimas estrategias de subcontratación de empresas y trabajos para ejecutar áreas para lo cual no tenían capacidades. La urgencia de terminar para esa fecha la construcción se debe a que para ese momento se cumplían el XIV aniversario del inicio de la Guerra Federal y se requería de un lugar apropiado que alojase al Primer Congreso surgido de la Revolución de Abril de 1870.
José María Rojas, delegado de la Compañía de Crédito, dirigió el 13 de enero de 1873 una singular proclama que decía, entre otras cosas: «Operarios del Capitolio: Al pie de estas murallas, la ciudad entera os contempla para daros una silba horrorosa, si no acabáis la obra para febrero. Apenas os quedan 30 días hábiles para dar esta batalla … » En lugar de «silba» o rechifla, los obreros recibieron aplausos y fueron condecorados por Guzmán Blanco.
El avance en el ritmo de construcción de la obra fue utilizado como muestra de la eficiencia del régimen de Guzmán Blanco llamado también de “La Regeneración”. Un periódico oficialísta, “La Opinión Nacional” del escritor Nicanor Bolet Peraza comparaba al autócrata; con Pericles, ilustre gobernante ateniense que impulso el desarrollo de la civilización Helena. La construcción fue entregada al gobierno el 19 de febrero de 1873, constituida por una fachada de orden dórico con un cuerpo ático central. El día 27 de febrero de 1873 sesionaron las Cámaras Legislativas siendo elegido Presidente del Senado y del Congreso Antonio Leocadio Guzmán padre de Antonio Guzmán Blanco y de los Diputados el General Jesús María Paúl.
En junio de 1873 se reanudaron los trabajos de construcción del resto de la edificación a cargo del Ing Urdaneta, mientras tanto fue contratado Martín Tovar y Tovar para pintar un retrato al óleo del presidente del cuerpo legislativo y de treinta próceres y ciudadanos ilustres de Venezuela. El 8 de junio Jesús Muñoz Tebar jefe del recién creado Ministerio de Obras Públicas contrata a la empresa británica The Crumlin Works & Co Ltd para la elaboración de la gran fuente central y demás obras de hierro fundido y forjado diseñadas por el Ingeniero Urdaneta y en donde aun se pueden ver las siglas “GB” de Guzmán Blanco.
El 10 de febrero de 1876 se iniciaron los trabajos de cuerpo norte o Palacio Federal estando presidida la compañía esta vez por Henry Lord Boulton, continuando como director el Ingeniero Urdaneta. El conjunto en su totalidad se concluyó el 20 de diciembre de 1877. Pero a pesar de su conclusión se siguió trabajando en el mejoramiento de detalles y ornamentación, así como en lo bulevares adyacentes. El patrimonio del Capitolio Federal se enriqueció con la donación de un cuadro del Libertador del artista peruano José Gil de Castro, con los murales encargados a Martín Tovar y Tovar ” La Batalla de Carabobo”, “La Batalla de Boyacá”, y “La Batalla de Ayacucho”, “El Tríptico Bolivariano” de Tito Salas y el Libro de Actas del Congreso de 1811. Entre 1890 y 1892 el Ingeniero Antonio Malaussena dirigió la colocación de la sobrecúpula traída de los Estados Unidos con el fin de proteger las obras de arte, se instaló la luz eléctrica y por un proyecto del Ingeniero Urdaneta se remodeló el interior del cuerpo sur dándole forma de hemiciclo. El nombre de Capitolio Federal sirve para designar el edificio en su conjunto, sirviendo como sede del Poder Legislativo y símbolo de la institucionalidad democrática en Venezuela.
19 de Febrero de 2014: Muere Simón Díaz
Ver: 08 de Agosto de 1928: Nace Simón Díaz20 de Febrero de 1821: La Capital se muda de Angostura
El 20 de febrero de 1821 el gobierno se
muda desde Angostura hacia la ciudad de Cúcuta, perteneciente al
Departamento de Nueva Granada, hoy Colombia, donde quedaba temporalmente
establecida la capital. Le correspondió a Carlos Soublette, quien
ejercía la Vicepresidencia de la República para ese momento, efectuar el
traslado. El Congreso de Cúcuta fijó luego la capital de la República
de Colombia en Bogotá, provocando reacciones desfavorables entre los
venezolanos.
20 de Febrero de 1859: Estalla la Guerra Federal
El
20 de febrero de 1859 estalló en la ciudad de Coro el movimiento de la
Federación, que después se convirtió en una guerra de funestas
consecuencias para Venezuela.
A esta guerra también se le ha llamado «Guerra Larga», «Revolución Federal» y «Guerra de los cinco años».
Después de la guerra de independencia, es la más larga contienda civil que ha sufrido nuestra patria. Muchos historiadores coinciden en que fue como una «prolongación de la guerra de independencia en cuanto a los problemas de carácter social y político, dejados sin resolver una vez lograda definitivamente la emancipación de España con las victorias de 1821 y 1823 y la separación de la Gran Colombia bolivariana en 1830. »
Los abanderados de este movimiento fueron Ezequiel Zamora y Juan Crisóstomo Falcón. Este día, el comandante Tirso Salaverría asalta el cuartel de Coro, se apodera de 900 fusiles y lanza el «Grito de Federación».
Al día siguiente, la proclama inicial de la Federación fue lanzada en Coro. El Coronel Tirso Salaverría, quien junto con Toledo, cuñado de Zamora y concuñado de Falcón, había dado el golpe el día anterior, se dirige al pueblo de Venezuela, pero muy en particular a los corianos, en términos de verdadera exaltación:
«La revolución de marzo ha sido inicuamente falseada. Atraídos por los encantos de su programa fascinador, concurrieron a consumarla todos los venezolanos; y su triunfo no ha producido otros gajes que el entronizamiento de una minoría siempre retrógrada, siempre impotente en su caída, siempre ávida de satisfacer innobles venganzas… »
Después de felicitar al pueblo por la hazaña de la noche anterior, al acompañarlo en la «grave empresa de desarmar la fuerza y apoderarnos de las armas con que un esbirro, remedo de gobernador del general Castro, nos oprimiera… », y de instigar a arrostrar la lucha de esta campaña que comienza, Salaverría agrega:
«¡Corianos! No temáis. La Federación es el Gobierno de los libres, y Venezuela obtendrá el lauro de la Federación. No hay un solo venezolano, con excepción del reducido club que hasta ahora nos ha dominado, cuyo corazón no lata de entusiasmo al impulso de esa voz mágica y arrobadora… ».
El 23 de febrero de ese mismo año se conoce en Caracas que había estallado en Coro el movimiento de la Federación. Esto motivó la renuncia de los Ministros Lucio Siso, Miguel Herrera y doctor Sanojo, sustituidos respectivamente por Rafael Arvelo, Pedro Casas y Soublette. La agitación en la capital es notoria.
Es por esto que en el Escudo Nacional, al lado de la fecha del 19 de Abril de 1810 aparece la del 20 de febrero de 1859. Al día siguiente de este pronunciamiento de Coro, el Coronel Salaverría «lanza una proclama que es una declaración de guerra» que duraría lamentablemente hasta el 24 de abril de 1863 cuando, después de largas negociaciones, se firma el Tratado de Coche. [Ver “La Guerra Federal: Causas y Consecuencias“]
A esta guerra también se le ha llamado «Guerra Larga», «Revolución Federal» y «Guerra de los cinco años».
Después de la guerra de independencia, es la más larga contienda civil que ha sufrido nuestra patria. Muchos historiadores coinciden en que fue como una «prolongación de la guerra de independencia en cuanto a los problemas de carácter social y político, dejados sin resolver una vez lograda definitivamente la emancipación de España con las victorias de 1821 y 1823 y la separación de la Gran Colombia bolivariana en 1830. »
Los abanderados de este movimiento fueron Ezequiel Zamora y Juan Crisóstomo Falcón. Este día, el comandante Tirso Salaverría asalta el cuartel de Coro, se apodera de 900 fusiles y lanza el «Grito de Federación».
Al día siguiente, la proclama inicial de la Federación fue lanzada en Coro. El Coronel Tirso Salaverría, quien junto con Toledo, cuñado de Zamora y concuñado de Falcón, había dado el golpe el día anterior, se dirige al pueblo de Venezuela, pero muy en particular a los corianos, en términos de verdadera exaltación:
«La revolución de marzo ha sido inicuamente falseada. Atraídos por los encantos de su programa fascinador, concurrieron a consumarla todos los venezolanos; y su triunfo no ha producido otros gajes que el entronizamiento de una minoría siempre retrógrada, siempre impotente en su caída, siempre ávida de satisfacer innobles venganzas… »
Después de felicitar al pueblo por la hazaña de la noche anterior, al acompañarlo en la «grave empresa de desarmar la fuerza y apoderarnos de las armas con que un esbirro, remedo de gobernador del general Castro, nos oprimiera… », y de instigar a arrostrar la lucha de esta campaña que comienza, Salaverría agrega:
«¡Corianos! No temáis. La Federación es el Gobierno de los libres, y Venezuela obtendrá el lauro de la Federación. No hay un solo venezolano, con excepción del reducido club que hasta ahora nos ha dominado, cuyo corazón no lata de entusiasmo al impulso de esa voz mágica y arrobadora… ».
El 23 de febrero de ese mismo año se conoce en Caracas que había estallado en Coro el movimiento de la Federación. Esto motivó la renuncia de los Ministros Lucio Siso, Miguel Herrera y doctor Sanojo, sustituidos respectivamente por Rafael Arvelo, Pedro Casas y Soublette. La agitación en la capital es notoria.
Es por esto que en el Escudo Nacional, al lado de la fecha del 19 de Abril de 1810 aparece la del 20 de febrero de 1859. Al día siguiente de este pronunciamiento de Coro, el Coronel Salaverría «lanza una proclama que es una declaración de guerra» que duraría lamentablemente hasta el 24 de abril de 1863 cuando, después de largas negociaciones, se firma el Tratado de Coche. [Ver “La Guerra Federal: Causas y Consecuencias“]
20 de Febrero de 1938: Inauguración del Museo de Bellas Artes
El
20 de febrero de 1938 se inauguró en Caracas el Museo de Bellas Artes,
siendo el primer director el artista Carlos Otero. El General Gómez
había decretado la construcción de un nuevo edificio en el Parque Los
Caobos y al General López Contreras le correspondió contratar el
proyecto, el cual encargó al arquitecto Carlos Raúl Villanueva, en 1936.
La selección de las primeras obras la hizo Enrique Planchart, quien realizó también el primer catálogo. Hoy, el Museo ofrece una exposición permanente de artistas venezolanos, entre quienes figuran Arturo Michelena, Cristóbal Rojas, Tovar y Tovar, Tito Salas, Reverón, Luis Alfredo López Méndez, etc.
La selección de las primeras obras la hizo Enrique Planchart, quien realizó también el primer catálogo. Hoy, el Museo ofrece una exposición permanente de artistas venezolanos, entre quienes figuran Arturo Michelena, Cristóbal Rojas, Tovar y Tovar, Tito Salas, Reverón, Luis Alfredo López Méndez, etc.
21 de Febrero de 1936: El Programa de Febrero de López Contreras
El 21 de febrero de 1936 el Presidente
López Contreras da a conocer el llamado Programa de Febrero, en el que
hace un diagnóstico de las áreas problemáticas del país y de las
soluciones más convenientes para enfrentarlas.
Las propuestas más importantes eran: la promulgación de una Constitución Nacional más acorde con la apertura democrática que el país estaba experimentando, estableciendo la reorganización de la administración de Justicia y reconociendo las libertades y derechos relativos al trabajo, mediante la creación de una Oficina Nacional del Trabajo; el desarrollo de una campaña sanitaria a nivel nacional, incluyendo la lucha contra enfermedades epidémicas y la creación de un Instituto de Higiene con el objeto de atender a la formación de un programa de obras y servicios públicos; la creación de una aviación comercial nacional y fomento de la marina mercante.
Reorganizar la educación mediante la lucha contra el analfabetismo, el estímulo al deporte y la creación de un Instituto Pedagógico para la preparación del docente; la creación de escuelas de artes y oficios; la reorganización del Ministerio de Agricultura y Veterinaria; reforma del sistema tributario, buscando elevar la renta minera, y del sistema bancario nacional mediante el establecimiento de un Banco Central de emisión; celebración de tratados comerciales bilaterales y multilaterales; fomentar la inmigración y colonización interior del país, modernizar el ejército e incentivar, con ayuda del Estado, el aparato productivo nacional.
El Programa de Febrero tuvo efectos políticos inmediatos para el gobierno de López Contreras, pues logra reducir el clima de oposición existente, aún cuando algunas organizaciones políticas continuaron proponiendo programas de mayor democratización política y económica para el país. El Programa de Febrero fue el primer gran proyecto de reforma del Estado moderno.
Las propuestas más importantes eran: la promulgación de una Constitución Nacional más acorde con la apertura democrática que el país estaba experimentando, estableciendo la reorganización de la administración de Justicia y reconociendo las libertades y derechos relativos al trabajo, mediante la creación de una Oficina Nacional del Trabajo; el desarrollo de una campaña sanitaria a nivel nacional, incluyendo la lucha contra enfermedades epidémicas y la creación de un Instituto de Higiene con el objeto de atender a la formación de un programa de obras y servicios públicos; la creación de una aviación comercial nacional y fomento de la marina mercante.
Reorganizar la educación mediante la lucha contra el analfabetismo, el estímulo al deporte y la creación de un Instituto Pedagógico para la preparación del docente; la creación de escuelas de artes y oficios; la reorganización del Ministerio de Agricultura y Veterinaria; reforma del sistema tributario, buscando elevar la renta minera, y del sistema bancario nacional mediante el establecimiento de un Banco Central de emisión; celebración de tratados comerciales bilaterales y multilaterales; fomentar la inmigración y colonización interior del país, modernizar el ejército e incentivar, con ayuda del Estado, el aparato productivo nacional.
El Programa de Febrero tuvo efectos políticos inmediatos para el gobierno de López Contreras, pues logra reducir el clima de oposición existente, aún cuando algunas organizaciones políticas continuaron proponiendo programas de mayor democratización política y económica para el país. El Programa de Febrero fue el primer gran proyecto de reforma del Estado moderno.
22 de Febrero de 1512: Muere Américo Vespucio
El
22 de febrero de 1512 muere en Sevilla Américo Vespucio, quien por su
condición de cartógrafo y los numerosos escritos sobre las tierras
descubiertas por Colón y sus seguidores, además de su gran astucia,
logró que se originara de su nombre el de América. Había nacido en
Florencia, Italia, hacia el año de 1454.
En realidad, Vespucio fue el primero que se dio cuenta de la continentalidad de América, y por tanto que estaban frente a un Nuevo Mundo. Así, en 1504 escribe su polémica obra Mundus Novus, que se popularizó prontamente, haciéndose 12 ediciones el primer año.
En 1505 publicó su famosa Carta, donde habla de sus cuatro viajes. Esta Carta fue traducida al latín y publicada en 1507 por el cartógrafo Martín Waldseemüller, quien propuso de plano que se diera el nombre de América al nuevo continente, por considerar que el mérito del descubrimiento era suyo. Así, sin que el propio Américo Vespucio lo supiera, se estaba inmortalizando su nombre. Lo mismo sucedió con Venezuela.
Los primeros exploradores, al penetrar en el lago de Maracaibo, descubrieron varios poblados cuyas casas, apoyadas en estacas clavadas en el fondo del lago, estaban edificadas sobre el agua. Esta disposición les recordó Venecia; por tanto, llamaron al conjunto Venezuela; o sea, «pequeña Venecia». El nombre se debe al italiano Américo Vespucio, que, junto con Juan de la Cosa, participó en la expedición de Alonso de Ojeda, efectuada en 1499.
El cronista fray Pedro Simón, en su obra Noticias historiales, dice que, cuando los primeros europeos descubrieron el lago, lo hallaron habitado, especialmente hacia el este. Había grandes poblados formados de palafitos -es decir, construidos dentro del agua – cerca de las orillas y también en partes más profundas, en las que el agua llegaba a la altura del pecho. Las casas estaban apoyadas sobre grandes maderos clavados en el fondo y sus habitantes se comunicaban mediante canoas. Como de este modo está fundada Venecia, dice Simón, les pareció bien a los conquistadores poner por nombre a esta laguna y a sus poblaciones Venezuela, nombre que se extendió a toda la provincia. Los hombres viven sobre el agua, añade el cronista, en busca de más salud y por librarse de los mosquitos, «de los que hierve la tierra».
En realidad, Vespucio fue el primero que se dio cuenta de la continentalidad de América, y por tanto que estaban frente a un Nuevo Mundo. Así, en 1504 escribe su polémica obra Mundus Novus, que se popularizó prontamente, haciéndose 12 ediciones el primer año.
En 1505 publicó su famosa Carta, donde habla de sus cuatro viajes. Esta Carta fue traducida al latín y publicada en 1507 por el cartógrafo Martín Waldseemüller, quien propuso de plano que se diera el nombre de América al nuevo continente, por considerar que el mérito del descubrimiento era suyo. Así, sin que el propio Américo Vespucio lo supiera, se estaba inmortalizando su nombre. Lo mismo sucedió con Venezuela.
Los primeros exploradores, al penetrar en el lago de Maracaibo, descubrieron varios poblados cuyas casas, apoyadas en estacas clavadas en el fondo del lago, estaban edificadas sobre el agua. Esta disposición les recordó Venecia; por tanto, llamaron al conjunto Venezuela; o sea, «pequeña Venecia». El nombre se debe al italiano Américo Vespucio, que, junto con Juan de la Cosa, participó en la expedición de Alonso de Ojeda, efectuada en 1499.
El cronista fray Pedro Simón, en su obra Noticias historiales, dice que, cuando los primeros europeos descubrieron el lago, lo hallaron habitado, especialmente hacia el este. Había grandes poblados formados de palafitos -es decir, construidos dentro del agua – cerca de las orillas y también en partes más profundas, en las que el agua llegaba a la altura del pecho. Las casas estaban apoyadas sobre grandes maderos clavados en el fondo y sus habitantes se comunicaban mediante canoas. Como de este modo está fundada Venecia, dice Simón, les pareció bien a los conquistadores poner por nombre a esta laguna y a sus poblaciones Venezuela, nombre que se extendió a toda la provincia. Los hombres viven sobre el agua, añade el cronista, en busca de más salud y por librarse de los mosquitos, «de los que hierve la tierra».
22 de Febrero de 1908: Nacimiento de Rómulo Betancourt
Este
singular caudillo venezolano nació en Guatire el 22 de febrero de 1908.
Es uno de los políticos más destacados y controvertibles de América
Latina. A los veinte años se inicia en la actividad política al
participar en la protesta estudiantil contra Juan Vicente Gómez, en
1928. Fue apresado y recluido en el Castillo de Puerto Cabello y
posteriormente desterrado.
Betancourt fue fundador de las organizaciones políticas Agrupación Revolucionaria de Izquierda (ARDI), Organización Revolucionaria (ORVE) y finalmente el Partido Acción Democrática (AD), que le llevó a la Presidencia de la República en las elecciones del 7 de diciembre de 1958.
Fue su gobierno uno de los más convulsionados de los últimos tiempos. Grupos extremistas brotaban por doquier tratando de torpedear la democracia establecida. A los alzamientos militares seguían las acciones guerrilleras. Las montañas de Venezuela estaban prácticamente tomadas por estos grupos irregulares. El 24 de junio de 1960, día del Ejército y de la Batalla de Carabobo, cuando el presidente, se dirigía a los actos oficiales en Los Próceres se produjo un atentado contra Betancourt, del que se salvó milagrosamente, ya que a escasos metros del vehículo en que viajaba estalló una poderosa carga de explosivos.
En este atentado murió el Jefe de la Casa Militar y el propio Betancourt sufrió graves quemaduras. Como consecuencia de esto se produjo el rompimiento con la República Dominicana, al establecerse culpabilidad de las autoridades de esta isla en el complot.
Ante la situación de zozobra que vivía el país, Betancourt hace coalición con los partidos Copei y URD, lo que permitió que se mantuviera el régimen democrático, con firme apoyo popular. En 1961 se promulga la nueva Constitución, que rigió hasta el 29 de diciembre de 1999. En ese mismo año, Venezuela rompe relaciones diplomáticas con Cuba, en virtud de la ayuda que Fidel Castro prestaba a los guerrilleros venezolanos en su acción contra el Gobierno y el sistema. Para el 16 de diciembre de 1961 llega al país el Presidente de los Estados Unidos, John F. Kennedy, quien fue recibido por una multitud delirante.
El 4 de mayo de 1962 se sublevan las fuerzas navales de Carúpano (lo que se llamó el carupanazo), y casi enseguida, en junio estalla el porteñazo (sublevación de Puerto Cabello), con saldo lastimoso de muertos y heridos. Betancourt declara fuera de la Ley a los Partidos Comunista y MIR (Movimiento de Izquierda Revolucionaria), por comprobárseles directa participación en estos sucesos.
En julio de 1963 llega al país el ex-dictador Marcos Pérez Jiménez, de quien se había solicitado la extradición. Pérez Jiménez se encontraba residenciado en Estados Unidos, viviendo opulentamente. La Corte Suprema de Justicia de aquel país consideró válidos los argumentos para la extradición y lo remitió a la justicia venezolana. Aquí se le siguió un prolongado juicio por peculado, lo que terminó con sentencia condenatoria por un período menor que el que llevaba detenido, por lo que salió en libertad y voló a residenciarse en Madrid.
Entre otros hechos positivos del Gobierno de Betancourt, pueden citarse la promulgación de la Ley de Reforma Agraria, el 5 de marzo de 1960, en el histórico Campo de Carabobo, ante ciento de miles de campesinos; la creación de la CVP y la CVG; la conclusión de la Construcción del Puente sobre el Lago de Maracaibo; etc. Ante una grave recesión económica, Betancourt no vaciló en ordenar una rebaja del diez por ciento en los sueldos de los empleados públicos.
Al finalizar este período, pese a todos los azares, se realizaron unas ejemplares elecciones, en las que resultó ganador el doctor Raúl Leoni. La transmisión de mando en el Congreso Nacional, fue un imponente acto que sosegó los espíritus, pues se creía a cada paso que Betancourt no llegaría al final de su mandato, ante multitud de amenazas internas y externas; de allí una de sus frases célebres como la mayoría, de que «ni renuncio ni me renuncian» y de que gobernaría hasta el final «ni un día más ni un día menos», sin embargo por accidente logró la «ñapa en el Gobierno».
Don Rómulo estuvo un tiempo residenciado en Suiza, Murió repentinamente en Nueva York, el 28 de Septiembre de 1981 víctima de un derrame cerebral masivo.
Betancourt fue fundador de las organizaciones políticas Agrupación Revolucionaria de Izquierda (ARDI), Organización Revolucionaria (ORVE) y finalmente el Partido Acción Democrática (AD), que le llevó a la Presidencia de la República en las elecciones del 7 de diciembre de 1958.
Fue su gobierno uno de los más convulsionados de los últimos tiempos. Grupos extremistas brotaban por doquier tratando de torpedear la democracia establecida. A los alzamientos militares seguían las acciones guerrilleras. Las montañas de Venezuela estaban prácticamente tomadas por estos grupos irregulares. El 24 de junio de 1960, día del Ejército y de la Batalla de Carabobo, cuando el presidente, se dirigía a los actos oficiales en Los Próceres se produjo un atentado contra Betancourt, del que se salvó milagrosamente, ya que a escasos metros del vehículo en que viajaba estalló una poderosa carga de explosivos.
En este atentado murió el Jefe de la Casa Militar y el propio Betancourt sufrió graves quemaduras. Como consecuencia de esto se produjo el rompimiento con la República Dominicana, al establecerse culpabilidad de las autoridades de esta isla en el complot.
Ante la situación de zozobra que vivía el país, Betancourt hace coalición con los partidos Copei y URD, lo que permitió que se mantuviera el régimen democrático, con firme apoyo popular. En 1961 se promulga la nueva Constitución, que rigió hasta el 29 de diciembre de 1999. En ese mismo año, Venezuela rompe relaciones diplomáticas con Cuba, en virtud de la ayuda que Fidel Castro prestaba a los guerrilleros venezolanos en su acción contra el Gobierno y el sistema. Para el 16 de diciembre de 1961 llega al país el Presidente de los Estados Unidos, John F. Kennedy, quien fue recibido por una multitud delirante.
El 4 de mayo de 1962 se sublevan las fuerzas navales de Carúpano (lo que se llamó el carupanazo), y casi enseguida, en junio estalla el porteñazo (sublevación de Puerto Cabello), con saldo lastimoso de muertos y heridos. Betancourt declara fuera de la Ley a los Partidos Comunista y MIR (Movimiento de Izquierda Revolucionaria), por comprobárseles directa participación en estos sucesos.
En julio de 1963 llega al país el ex-dictador Marcos Pérez Jiménez, de quien se había solicitado la extradición. Pérez Jiménez se encontraba residenciado en Estados Unidos, viviendo opulentamente. La Corte Suprema de Justicia de aquel país consideró válidos los argumentos para la extradición y lo remitió a la justicia venezolana. Aquí se le siguió un prolongado juicio por peculado, lo que terminó con sentencia condenatoria por un período menor que el que llevaba detenido, por lo que salió en libertad y voló a residenciarse en Madrid.
Entre otros hechos positivos del Gobierno de Betancourt, pueden citarse la promulgación de la Ley de Reforma Agraria, el 5 de marzo de 1960, en el histórico Campo de Carabobo, ante ciento de miles de campesinos; la creación de la CVP y la CVG; la conclusión de la Construcción del Puente sobre el Lago de Maracaibo; etc. Ante una grave recesión económica, Betancourt no vaciló en ordenar una rebaja del diez por ciento en los sueldos de los empleados públicos.
Al finalizar este período, pese a todos los azares, se realizaron unas ejemplares elecciones, en las que resultó ganador el doctor Raúl Leoni. La transmisión de mando en el Congreso Nacional, fue un imponente acto que sosegó los espíritus, pues se creía a cada paso que Betancourt no llegaría al final de su mandato, ante multitud de amenazas internas y externas; de allí una de sus frases célebres como la mayoría, de que «ni renuncio ni me renuncian» y de que gobernaría hasta el final «ni un día más ni un día menos», sin embargo por accidente logró la «ñapa en el Gobierno».
Don Rómulo estuvo un tiempo residenciado en Suiza, Murió repentinamente en Nueva York, el 28 de Septiembre de 1981 víctima de un derrame cerebral masivo.
23 de Febrero de 1825: Perú honra a Simón Bolívar
El
23 de febrero de 1825 Bolívar, refiriéndose a todas las gracias que le
confirió el Congreso del Perú, escribe: «Me ha nombrado Padre y Salvador
del Perú; me ha decretado los honores de Presidente perpetuo; ha
mandado grabar mi busto en una medalla; me ha llamado Libertador; y me
ha obligado a encargarme del mando del Perú, y después me señala una
enorme fortuna. Yo he aceptado todo con gozo, menos lo último; porque
las leyes de mi patria y las de mi corazón me lo prohiben».
Simón Bolívar, en efecto, llegó a ser idolatrado en el Perú. El hecho de haberle dado la independencia, al dirigir la campaña del Sur que culminó con la batalla de Ayacucho, significó para los peruanos la gloria máxima. Sin embargo, los tiempos han pasado, y hoy en día en el Perú el bolivarianismo pugna por sobrevivir, ya que se ha creado una generación que no quiere reconocer a Bolívar como su Libertador.
Simón Bolívar rechaza el millón de pesos que el Gobierno del Perú le había ofrecido en recompensa a sus altos servicios. En vista de las repetidas negativas a recibir el dinero, el Congreso pidió a Bolívar que lo aceptara y utilizara en obras de beneficencia en las ciudades de Colombia.
Simón Bolívar, en efecto, llegó a ser idolatrado en el Perú. El hecho de haberle dado la independencia, al dirigir la campaña del Sur que culminó con la batalla de Ayacucho, significó para los peruanos la gloria máxima. Sin embargo, los tiempos han pasado, y hoy en día en el Perú el bolivarianismo pugna por sobrevivir, ya que se ha creado una generación que no quiere reconocer a Bolívar como su Libertador.
Simón Bolívar rechaza el millón de pesos que el Gobierno del Perú le había ofrecido en recompensa a sus altos servicios. En vista de las repetidas negativas a recibir el dinero, el Congreso pidió a Bolívar que lo aceptara y utilizara en obras de beneficencia en las ciudades de Colombia.
24 de Febrero de 1854: Muere Daniel Florencio O´Leary
El
24 de febrero de 1854 muere en Bogotá Daniel Florencio O’Leary, natural
de Cork, Irlanda, pero sumado a la causa patriota desde que llegó a
Venezuela en 1818, con la expedición que organizó en Inglaterra el
Coronel Wilson, contaba con 16 años de edad cuando se embarcó como
alférez del cuerpo de auxiliar de Húsares Rojos.
Separado ya de las tropas de Wilson y puesto a las órdenes de Soublette en Angostura, es incorporado por éste a las fuerzas de Anzoátegui y a poco es ascendido a Capitán.
Se distinguió en las acciones de Pantano de Vargas, Boyacá, Carabobo, Pichincha, Tarqui, etc. Bolívar lo escogió para ser uno de sus edecanes. Escribió sus Memorias que constituyen un inapreciable aporte al conocimiento de la Historia de la Independencia. A O’Leary se le llama el «cuarto evangelista» del Libertador por la gran devoción que demostró a Bolívar. A uno de sus hijos le bautizó con el nombre de Simón Bolívar O’Leary.
Concluida la Guerra de independencia, prestó destacados servicios a Venezuela al realizar diversas gestiones diplomáticas en Inglaterra y Nueva Granada.
Como Edecán de la íntima confianza del Libertador y por esa devoción a la que hemos hecho referencia, conservó gran parte del archivo que posterior al año 1830 fue incrementando con la ayuda de sus antiguos compañeros de armas, a quienes solicitaba el documento para su recopilación.
Esta importantísima colección pasó a sus hijos, quienes la cedieron al Estado Venezolano durante la presidencia de Antonio Guzmán Blanco, dándose inicio al Archivo del Libertador, que actualmente se conserva en la Sociedad Bolivariana de Venezuela, Caracas.
Separado ya de las tropas de Wilson y puesto a las órdenes de Soublette en Angostura, es incorporado por éste a las fuerzas de Anzoátegui y a poco es ascendido a Capitán.
Se distinguió en las acciones de Pantano de Vargas, Boyacá, Carabobo, Pichincha, Tarqui, etc. Bolívar lo escogió para ser uno de sus edecanes. Escribió sus Memorias que constituyen un inapreciable aporte al conocimiento de la Historia de la Independencia. A O’Leary se le llama el «cuarto evangelista» del Libertador por la gran devoción que demostró a Bolívar. A uno de sus hijos le bautizó con el nombre de Simón Bolívar O’Leary.
Concluida la Guerra de independencia, prestó destacados servicios a Venezuela al realizar diversas gestiones diplomáticas en Inglaterra y Nueva Granada.
Como Edecán de la íntima confianza del Libertador y por esa devoción a la que hemos hecho referencia, conservó gran parte del archivo que posterior al año 1830 fue incrementando con la ayuda de sus antiguos compañeros de armas, a quienes solicitaba el documento para su recopilación.
Esta importantísima colección pasó a sus hijos, quienes la cedieron al Estado Venezolano durante la presidencia de Antonio Guzmán Blanco, dándose inicio al Archivo del Libertador, que actualmente se conserva en la Sociedad Bolivariana de Venezuela, Caracas.
6 de Febrero de 1787: Constitución de la Real Audiencia de Caracas
El 26 de febrero de 1787, siendo Capitán
General don Juan de Guillelmi, se constituyó la Real Audiencia de
Caracas. La presidía el mismo Capitán General, pero éste no era más que
un cargo honorífico, pues dicha autoridad no tenía voz ni voto.
Este organismo se comportó meritoriamente, a tal punto que H. García Chuecos lo elogia «por sus lecciones de civismo, de integridad y decoro». Y Parra Páez dice que «En principio puede afirmarse que la Real Audiencia prolongaba en Venezuela la gran tradición judicial española y aplicaba justamente las leyes».
Este organismo se comportó meritoriamente, a tal punto que H. García Chuecos lo elogia «por sus lecciones de civismo, de integridad y decoro». Y Parra Páez dice que «En principio puede afirmarse que la Real Audiencia prolongaba en Venezuela la gran tradición judicial española y aplicaba justamente las leyes».
27 de Febrero de 1873: Muere José Laurencio Silva
El 7 de setiembre de 1791 nace en Tinaco, estado Cojedes, José Laurencio Silva.
Desde 1811 actúa bajo las órdenes del Marqués del Toro, en la campaña contra Coro, y luego de Miranda, en Valencia. Al perderse la Primera República, J.L. Silva se refugia en los bosques de Cojedes para seguir una guerra de guerrillas.
En 1813 se une al Libertador en San Carlos, aportándole su escuadrón de caballería. Desde la batalla de Taguanes (31-07-1813) hasta que cae preso en 1814, desarrolla una increíble actividad, participando en acciones militares. A saber: La Victoria, Bárbula, Araure, Mosquiteros, La Puerta, San Mateo, El Arao, Mantecal, El Yagual, Mucuritas, Barinas, Queseras del Medio, Carabobo, Bomboná, Junín, Matará, Ayacucho y Portete de Tarqui
Acompaña a Bolívar en la campaña del Sur. Pelea en Bomboná, Junín y Ayacucho, acción ésta en la que recibió tres lanzazos. Aquí fue ascendido a General de Brigada.
En 1827, al regresar a Caracas, se casa con Felicia Bolívar, sobrina del Libertador. Después de haber sido elevado a General de División en 1829. En 1849 se puso al frente de las fuerzas que combatieron al General Páez, el cual hubo de capitular. Fue General en Jefe del Ejército y Ministro de Guerra y Marina. Acompañó al Libertador en sus últimos momentos en Santa Marta Muere en Valencia el 27 de febrero de 1873. Sus restos reposan en el Panteón Nacional.
Desde 1811 actúa bajo las órdenes del Marqués del Toro, en la campaña contra Coro, y luego de Miranda, en Valencia. Al perderse la Primera República, J.L. Silva se refugia en los bosques de Cojedes para seguir una guerra de guerrillas.
En 1813 se une al Libertador en San Carlos, aportándole su escuadrón de caballería. Desde la batalla de Taguanes (31-07-1813) hasta que cae preso en 1814, desarrolla una increíble actividad, participando en acciones militares. A saber: La Victoria, Bárbula, Araure, Mosquiteros, La Puerta, San Mateo, El Arao, Mantecal, El Yagual, Mucuritas, Barinas, Queseras del Medio, Carabobo, Bomboná, Junín, Matará, Ayacucho y Portete de Tarqui
Acompaña a Bolívar en la campaña del Sur. Pelea en Bomboná, Junín y Ayacucho, acción ésta en la que recibió tres lanzazos. Aquí fue ascendido a General de Brigada.
En 1827, al regresar a Caracas, se casa con Felicia Bolívar, sobrina del Libertador. Después de haber sido elevado a General de División en 1829. En 1849 se puso al frente de las fuerzas que combatieron al General Páez, el cual hubo de capitular. Fue General en Jefe del Ejército y Ministro de Guerra y Marina. Acompañó al Libertador en sus últimos momentos en Santa Marta Muere en Valencia el 27 de febrero de 1873. Sus restos reposan en el Panteón Nacional.
27 de Febrero de 1989: Estallido social del 27 de febrero de 1989
El
27 de febrero de 1989, apenas a 25 días de haber asumido su segunda
presidencia Carlos Andrés Pérez, se produce una explosión social en
Caracas y otras ciudades de Venezuela, como consecuencia de las medidas
que venía tomando el nuevo gobierno, como las de liberación de las tasas
de interés en todas las operaciones activas y pasivas, y para
complemento, la entrada en vigencia, el día anterior, de los nuevos
precios de la gasolina, que incidió de inmediato en el aumento de las
tarifas del transporte colectivo.
Aun cuando este era un hecho presentido, la magnitud del mismo tomó por sorpresa a muchos y dejó un doloroso saldo de centenares de muertos y de heridos, además de muchos negocios saqueados y de inocentes comerciantes quebrados, víctimas del vandalaje que cundió en las ciudades. El Gobierno militarizó el país y se suspendieron las garantías constitucionales.
Años después, aún se mantiene la controversia sobre si se pudo evitar o no el horror que Venezuela vivió este día. Se ha señalado que algunos Ministros habían alertado al Presidente Pérez sobre la posibilidad de un estallido social, y hasta le recomendaron que decretara toque de queda. No lo entendió así el gobierno, y ocurrió lo que sabemos. La militarización vino después, con las consecuencias lamentables ya conocidas, de un número de víctimas todavía no reconocido oficialmente, pero que se estima en más de tres mil, entre muertos, heridos y desaparecidos, sin contar los innumerables comercios saqueados y destruidos.
Aun cuando este era un hecho presentido, la magnitud del mismo tomó por sorpresa a muchos y dejó un doloroso saldo de centenares de muertos y de heridos, además de muchos negocios saqueados y de inocentes comerciantes quebrados, víctimas del vandalaje que cundió en las ciudades. El Gobierno militarizó el país y se suspendieron las garantías constitucionales.
Años después, aún se mantiene la controversia sobre si se pudo evitar o no el horror que Venezuela vivió este día. Se ha señalado que algunos Ministros habían alertado al Presidente Pérez sobre la posibilidad de un estallido social, y hasta le recomendaron que decretara toque de queda. No lo entendió así el gobierno, y ocurrió lo que sabemos. La militarización vino después, con las consecuencias lamentables ya conocidas, de un número de víctimas todavía no reconocido oficialmente, pero que se estima en más de tres mil, entre muertos, heridos y desaparecidos, sin contar los innumerables comercios saqueados y destruidos.
27 de Febrero de 1929: Nace Pedro León Zapata
Nacido
en en La Grita, estado Táchira, el 27 de febrero de 1929, Zapata fue
uno de los grandes representantes del periodismo gráfico en el país. Era
un intelectual cabal que bien fuera a través de su palabra o sus trazos
interpretaba la realidad del política, social y cultural del país, así
como la del todo el continente.
Hijo del coronel León José Zapata y de María de Lourdes Monroy, completó sus estudios de bachillerato en el Liceo San José de Los Teques, para pasar en 1943 a perfeccionar sus ya evidentes dotes artísticas en la Escuela de Artes Plásticas.
En 1945 ingresó a la Escuela de Artes Plásticas de Caracas. Dos años después se retiró de este centro para intervenir en la fundación del Taller La Barraca de Maripérez, donde exposu sus primeros trabajos e inició su labor de caricaturista. A finales de 1947 viajó a México para aprender las técnicas de los muralistas y realizó estudios en el Instituto Politécnico Nacional de México, en la Escuela de La Esmeralda y en el taller de Siqueiros. También trabajó como profesor en la escuela de Bellas Artes de Acapulco. Zapata, mientras vivió en México, no hizo caricaturas.
Hijo del coronel León José Zapata y de María de Lourdes Monroy, completó sus estudios de bachillerato en el Liceo San José de Los Teques, para pasar en 1943 a perfeccionar sus ya evidentes dotes artísticas en la Escuela de Artes Plásticas.
En 1945 ingresó a la Escuela de Artes Plásticas de Caracas. Dos años después se retiró de este centro para intervenir en la fundación del Taller La Barraca de Maripérez, donde exposu sus primeros trabajos e inició su labor de caricaturista. A finales de 1947 viajó a México para aprender las técnicas de los muralistas y realizó estudios en el Instituto Politécnico Nacional de México, en la Escuela de La Esmeralda y en el taller de Siqueiros. También trabajó como profesor en la escuela de Bellas Artes de Acapulco. Zapata, mientras vivió en México, no hizo caricaturas.
28 de Febrero de 1761: Nacimiento de José María España
Ver Mayo – José María España.
28 de Febrero de 1788: Fundación de San Fernando de Apure
El 28 de febrero de 1788 el Gobernador
de Barinas, Fernando Miyares González, conjuntamente con Juan Antonio
Rodríguez y fray Buenaventura de Benaocaz, funda la Villa de San
Fernando del Paso Real de Apure. El nombre fue un homenaje al Infante
don Fernando de Borbón.
Se han dado otras fechas indicando la fundación de San Fernando, pero se establece ésta como la definitiva, después que el padre Rafael Chacín Soto, párroco de Valle de la Pascua encontró en Sevilla el acta correspondiente, que fue reconocida y publicada por el académico Argenis Méndez Echenique en su Historia del Estado Apure.
Se han dado otras fechas indicando la fundación de San Fernando, pero se establece ésta como la definitiva, después que el padre Rafael Chacín Soto, párroco de Valle de la Pascua encontró en Sevilla el acta correspondiente, que fue reconocida y publicada por el académico Argenis Méndez Echenique en su Historia del Estado Apure.
28 de Febrero de 1814: Primera Batalla de San Mateo
El
28 de febrero de 1814 Simón Bolívar, al mando de los patriotas, vence
en extraordinaria como increíble batalla a Boves en San Mateo.
Se peleó en las calles del pueblo, en el río, en los caminos, en las alturas, durante más de diez horas. Las heridas de Boves le obligaron a retirarse, dejando en el campo de batalla entre 800 y 1000 muertos y heridos. Víctimas de esta acción fueron, entre otros, los insignes patriotas Villapol y Campo Elías.
El General Bencomo Barrios, historiador militar, describe la acción: «En las primeras horas del 28 de febrero atacaron los realistas. Boves, con la columna principal, cargó contra la derecha; mientras que Morales lo hacía contra el centro, y otra pequeña columna contra la izquierda. Para contrarrestar el ataque de Boves, Bolívar empleó el batallón Barlovento (Vicente Campo Elías), al mismo tiempo que rechazaba a Francisco Tomás Morales con fuegos de fusilería y artillería.
Desde la izquierda republicana, el teniente coronel Gogorza contraatacó la derecha realista y la puso en retirada. El combate se decidió en favor de Bolívar cuando éste lanzó un contraataque sobre las fuerzas de Boves, quien se retiró al otro lado del río Aragua.»
Se peleó en las calles del pueblo, en el río, en los caminos, en las alturas, durante más de diez horas. Las heridas de Boves le obligaron a retirarse, dejando en el campo de batalla entre 800 y 1000 muertos y heridos. Víctimas de esta acción fueron, entre otros, los insignes patriotas Villapol y Campo Elías.
El General Bencomo Barrios, historiador militar, describe la acción: «En las primeras horas del 28 de febrero atacaron los realistas. Boves, con la columna principal, cargó contra la derecha; mientras que Morales lo hacía contra el centro, y otra pequeña columna contra la izquierda. Para contrarrestar el ataque de Boves, Bolívar empleó el batallón Barlovento (Vicente Campo Elías), al mismo tiempo que rechazaba a Francisco Tomás Morales con fuegos de fusilería y artillería.
Desde la izquierda republicana, el teniente coronel Gogorza contraatacó la derecha realista y la puso en retirada. El combate se decidió en favor de Bolívar cuando éste lanzó un contraataque sobre las fuerzas de Boves, quien se retiró al otro lado del río Aragua.»
28 de Febrero de 1829: Nace Antonio Guzmán Blanco
Uno
de los grandes caudillos y ejes de la política venezolana por espacio
de casi veinte años, Antonio Guzmán Blanco nació en Caracas un 28 de
febrero de 1829. Estudió Derecho en la Universidad de Caracas y sus
viajes le dieron una gran experiencia en la política y en la
administración pública. Estuvo en Estados Unidos como Secretario de la
Legación de Venezuela en Washington.
Pero la verdadera carrera política y militar de Guzmán Blanco la inicia en 1859, cuando se origina la Guerra Federal y el futuro caudillo liberal se alinea al lado de Juan Crisóstomo Falcón y de Ezequiel Zamora. Al triunfar la Revolución, en 1863, pasa Guzmán Blanco a formar Gobierno.
En 1870 el mismo encabeza una revolución y logra entronizarse a la manera de los dictadores; en 1873 es electo Presidente de la República y gobierna en forma progresista hasta 1877; este período se conoce con el nombre de Septenio; luego asciende al poder Linares Alcántara, quien muere repentinamente y es Guzmán Blanco quien se encarga de nuevo de la Presidencia, desde 1879 hasta 1884, es decir, el período llamado Quinquenio; de 1884 a 1886 gobernó Joaquín Crespo, tornó a mandar Guzmán Blanco desde 1886 a 1888, período conocido con el nombre de Bienio.
Durante estos tres períodos Guzmán fue un autócrata, hizo un gobierno personalista y acomodó la Constitución a su conveniencia; sin embargo, la historia le reconoce el papel de civilizador, de modernizador de la Venezuela que él vivió. Hizo caminos a través del país, fomentó la agricultura y la instrucción (a él se le debe el decreto de instrucción pública y obligatoria, de 1870), estimuló el comercio; construyó el Panteón Nacional, El Capitolio, teatros, iglesias, etc.
Hizo fastuosa la celebración del Centenario del Nacimiento del Libertador en 1883. En definitiva, impulsó a Venezuela en los órdenes material y cultural, de acuerdo con la inteligencia y los grandes conocimientos que él poseía. Recibió el título de Ilustre Americano. Su padre, Antonio Leocadio Guzmán, también hombre público y fogoso periodista, no llegó a la posición del Caudillo. Guzmán Blanco murió en París, el 28 de julio de 1899.
Pero la verdadera carrera política y militar de Guzmán Blanco la inicia en 1859, cuando se origina la Guerra Federal y el futuro caudillo liberal se alinea al lado de Juan Crisóstomo Falcón y de Ezequiel Zamora. Al triunfar la Revolución, en 1863, pasa Guzmán Blanco a formar Gobierno.
En 1870 el mismo encabeza una revolución y logra entronizarse a la manera de los dictadores; en 1873 es electo Presidente de la República y gobierna en forma progresista hasta 1877; este período se conoce con el nombre de Septenio; luego asciende al poder Linares Alcántara, quien muere repentinamente y es Guzmán Blanco quien se encarga de nuevo de la Presidencia, desde 1879 hasta 1884, es decir, el período llamado Quinquenio; de 1884 a 1886 gobernó Joaquín Crespo, tornó a mandar Guzmán Blanco desde 1886 a 1888, período conocido con el nombre de Bienio.
Durante estos tres períodos Guzmán fue un autócrata, hizo un gobierno personalista y acomodó la Constitución a su conveniencia; sin embargo, la historia le reconoce el papel de civilizador, de modernizador de la Venezuela que él vivió. Hizo caminos a través del país, fomentó la agricultura y la instrucción (a él se le debe el decreto de instrucción pública y obligatoria, de 1870), estimuló el comercio; construyó el Panteón Nacional, El Capitolio, teatros, iglesias, etc.
Hizo fastuosa la celebración del Centenario del Nacimiento del Libertador en 1883. En definitiva, impulsó a Venezuela en los órdenes material y cultural, de acuerdo con la inteligencia y los grandes conocimientos que él poseía. Recibió el título de Ilustre Americano. Su padre, Antonio Leocadio Guzmán, también hombre público y fogoso periodista, no llegó a la posición del Caudillo. Guzmán Blanco murió en París, el 28 de julio de 1899.
28 de Febrero de 1854: Muerte de Simón Rodríguez
Nace
en Caracas Simón Rodríguez, calificado de “loco”, “maestro” o “don”,
este ejemplar venezolano, de padres desconocidos, el 28 de octubre de
1771. Se dice que fue hijo adoptivo de Cayetano Carreño y de Rosalía
Rodríguez. De su infancia, se conoce muy poco. Simón Rodríguez es un
niño expósito y su único familiar conocido es su hermano Gayetano.
Su carácter nada común lo lleva a quitarse el apellido paterno, el adoptivo y a quedarse sólo con el de su madre (originalmente se hubiera llamado Simón Carreño Rodríguez), por eso es que, el mismo Simón se presenta como expósito en el acta matrimonial.
Se caracterizará toda su vida por seguir apasionadamente su ideal de pensar y enseñar en libertad plena. Su vida estuvo dominada por la pasión de las letras.
El primer contacto de los dos Simones se produce cuando Rodríguez es contratado por Feliciano Palacios, abuelo de Bolívar, para que en su propia casa le sirva de amanuense. Más tarde, al fugarse de la casa de su tío Carlos Palacios, Bolívar ingresará a la escuela pública de Rodríguez.
Este era un maestro que enseñaba divirtiendo, según expresión bolivariana. Su manera de enseñar, distinta a todo lo tradicional, era en el campo, frente a la naturaleza, lo cual servía para el espíritu, para la fortaleza del cuerpo y para el conocimiento de las cosas que nos rodean. Si está en el aula, entre sus 114 alumnos (setenta y cuatro que pagan y cuarenta gratis, entre ellos nueve expósitos), les da instrucción adecuada a sus edades y les inculca las buenas costumbres y el amor por la libertad.
Su carácter nada común lo lleva a quitarse el apellido paterno, el adoptivo y a quedarse sólo con el de su madre (originalmente se hubiera llamado Simón Carreño Rodríguez), por eso es que, el mismo Simón se presenta como expósito en el acta matrimonial.
Se caracterizará toda su vida por seguir apasionadamente su ideal de pensar y enseñar en libertad plena. Su vida estuvo dominada por la pasión de las letras.
El primer contacto de los dos Simones se produce cuando Rodríguez es contratado por Feliciano Palacios, abuelo de Bolívar, para que en su propia casa le sirva de amanuense. Más tarde, al fugarse de la casa de su tío Carlos Palacios, Bolívar ingresará a la escuela pública de Rodríguez.
Este era un maestro que enseñaba divirtiendo, según expresión bolivariana. Su manera de enseñar, distinta a todo lo tradicional, era en el campo, frente a la naturaleza, lo cual servía para el espíritu, para la fortaleza del cuerpo y para el conocimiento de las cosas que nos rodean. Si está en el aula, entre sus 114 alumnos (setenta y cuatro que pagan y cuarenta gratis, entre ellos nueve expósitos), les da instrucción adecuada a sus edades y les inculca las buenas costumbres y el amor por la libertad.
28 de Febrero de 1871: Nace Manuel Díaz Rodríguez
Manuel
Díaz Rodríguez nació en el este de Caracas, el 28 de febrero de 1871.
Estudió en el Colegio Sucre y en la Universidad Central con Adolfo Ernst
y Rafael Villavicencio, exponentes del saber científico de Venezuela.
Había escrito ya otros libros como «Confidencias de Psiquis», «De mis Romerías», «Cuentos de Color» y su gran novela «Idolos Rotos», cuando muere su padre y el escritor debe encargarse de la propiedad paterna, la hacienda Los Dolores, y allí alterna, Virgilio de por medio, con las faenas agrícolas y la lectura de los clásicos y la preparación de otros ensayos –narraciones siempre lúcidas, siempre líricas-. De allí van a salir los libros «Sangre Patricia», «Camino de Perfección», «Sermones Líricos», «Peregrina o el Pozo Encantado».
¿Cómo pudo este escritor Díaz Rodríguez «el más completo de todos los maestros nacionales y extranjeros que liderizaron el modernismo», según el decir de Pedro Pablo Paredes, cómo pudo producir una obra literaria tan importante como fecunda en medio de la agitación que significa el activismo político administrativo? Porque ha de decirse que Díaz Rodríguez es en 1909 Vice-Rector de la Universidad Central; después fue Director de Educación y Bellas Artes en el Ministerio de Instrucción Pública; en 1914 es Ministro de Relaciones Exteriores; en 1915 Senador por el Estado Bolívar; en 1916, Ministro de Fomento; en 1918, otra vez Senador; en 1919 Embajador en Italia y Presidente de los Estados Nueva Esparta y Sucre, en 1925 y 26. Es decir, difícil tarea la de conciliar el ejercicio de estos cargos con el arte de la creación.
Y este maestro del modernismo, del lirismo, lo logró, sin desmejorar el estilo, como es el caso de Peregrina, novela que debió ser concebida bajo la más rigurosa disciplina, en cuanto a forma, y bajo las mejores condiciones del espíritu en cuanto a estética, tal es de sensible su narrativa.
No fue tan afortunado Díaz Rodríguez con la producción poética, vaciada en sus Eglogas del Avila, que si bien son perfectas en la estructura, como sonetos, no tienen el necesario vuelo poético. Díaz Rodríguez murió enfermo de Linfosarcoma, en Nueva York, el 24 de agosto de 1927. Dejó un libro póstumo: Entre las Colinas en Flor.
Había escrito ya otros libros como «Confidencias de Psiquis», «De mis Romerías», «Cuentos de Color» y su gran novela «Idolos Rotos», cuando muere su padre y el escritor debe encargarse de la propiedad paterna, la hacienda Los Dolores, y allí alterna, Virgilio de por medio, con las faenas agrícolas y la lectura de los clásicos y la preparación de otros ensayos –narraciones siempre lúcidas, siempre líricas-. De allí van a salir los libros «Sangre Patricia», «Camino de Perfección», «Sermones Líricos», «Peregrina o el Pozo Encantado».
¿Cómo pudo este escritor Díaz Rodríguez «el más completo de todos los maestros nacionales y extranjeros que liderizaron el modernismo», según el decir de Pedro Pablo Paredes, cómo pudo producir una obra literaria tan importante como fecunda en medio de la agitación que significa el activismo político administrativo? Porque ha de decirse que Díaz Rodríguez es en 1909 Vice-Rector de la Universidad Central; después fue Director de Educación y Bellas Artes en el Ministerio de Instrucción Pública; en 1914 es Ministro de Relaciones Exteriores; en 1915 Senador por el Estado Bolívar; en 1916, Ministro de Fomento; en 1918, otra vez Senador; en 1919 Embajador en Italia y Presidente de los Estados Nueva Esparta y Sucre, en 1925 y 26. Es decir, difícil tarea la de conciliar el ejercicio de estos cargos con el arte de la creación.
Y este maestro del modernismo, del lirismo, lo logró, sin desmejorar el estilo, como es el caso de Peregrina, novela que debió ser concebida bajo la más rigurosa disciplina, en cuanto a forma, y bajo las mejores condiciones del espíritu en cuanto a estética, tal es de sensible su narrativa.
No fue tan afortunado Díaz Rodríguez con la producción poética, vaciada en sus Eglogas del Avila, que si bien son perfectas en la estructura, como sonetos, no tienen el necesario vuelo poético. Díaz Rodríguez murió enfermo de Linfosarcoma, en Nueva York, el 24 de agosto de 1927. Dejó un libro póstumo: Entre las Colinas en Flor.
Febrero: Carnaval en Venezuela
El
Carnaval es una fiesta movible entre los meses de febrero y marzo. El
nombre de la palabra viene del latín carnen levare, que significa
«quitar la carne», es por eso que se dice que las fiestas carnestolendas
son las fiestas de la carne. Esta celebración es de origen muy antiguo;
mucho antes de la era cristiana existe referencia de su celebración en
las diferentes culturas europeas.
En Roma se celebraba con el nombre de saturnalia y estaba relacionada con el comienzo de la primavera. Con la instauración del cristianismo en Europa y la imposición de la cuaresma, período que comienza a contarse a partir del Miércoles de Ceniza, la festividad del Carnaval se colocó en los tres días anteriores a esta fecha en los que el pueblo se entregaba a todos los placeres que debía renunciar al iniciarse la cuaresma.
Para la edad media, estas festividades habían alcanzado gran popularidad en Francia, Alemania, España y sobre todo Italia, como el Carnaval de Venecia, que ha mantenido su fama desde la Edad Media hasta nuestros días.
En la actualidad, en Europa son famosos los carnavales de Venecia; Niza, en Francia; Baviera, en Alemania y los de Santa Cruz de Tenerife en las Islas Canarias. En América tienen gran renombre los de Nueva Orleans, en Estados Unidos; los de Río de Janeiro, Brasil y los de Aruba, Antillas Holandesas.
En Venezuela la tradición llegó junto con la conquista y se practicaba la costumbre de jugar con agua y todo tipo de sustancias como huevos, azulillo, etc. Con la llegada del Obispo Diez Madroñero a Caracas, en el siglo XVIII, los carnavales se convirtieron en tres días de rezos, rosarios y procesiones, por considerar el Obispo que eran fiestas pecaminosas.
Al arribar el Intendente José Abalos, volvió nuevamente el carnaval a Caracas, aunque de forma más refinada, celebrándose con comparsas, carrozas, arroz y confites, dejándole a los esclavos y a la plebe los juegos con agua y sustancias nocivas.
Así llegó al siglo XX la tradición en Venezuela con carrozas, disfraces, bailes populares y en salones refinados. A mediados de los años cincuenta y hasta finales de los sesenta, apareció un nuevo elemento: las famosas «negritas», quienes escondían la identidad en el disfraz para disfrutar sin complejos de la festividad.
En la actualidad, casi está a punto de desaparecer esta tradición, sobre todo en la capital, pues no es de obligación el asueto, y los que no trabajan salen fuera de la ciudad. Son famosos en Venezuela los Carnavales de El Callao, en el Estado Bolívar, donde la inmigración antillana agregó al calipso elementos como el cuatro y maracas, y al compás del Ambakaila de la Negra Isidora (ya fallecida) han mantenido la tradición.
En Roma se celebraba con el nombre de saturnalia y estaba relacionada con el comienzo de la primavera. Con la instauración del cristianismo en Europa y la imposición de la cuaresma, período que comienza a contarse a partir del Miércoles de Ceniza, la festividad del Carnaval se colocó en los tres días anteriores a esta fecha en los que el pueblo se entregaba a todos los placeres que debía renunciar al iniciarse la cuaresma.
Para la edad media, estas festividades habían alcanzado gran popularidad en Francia, Alemania, España y sobre todo Italia, como el Carnaval de Venecia, que ha mantenido su fama desde la Edad Media hasta nuestros días.
En la actualidad, en Europa son famosos los carnavales de Venecia; Niza, en Francia; Baviera, en Alemania y los de Santa Cruz de Tenerife en las Islas Canarias. En América tienen gran renombre los de Nueva Orleans, en Estados Unidos; los de Río de Janeiro, Brasil y los de Aruba, Antillas Holandesas.
En Venezuela la tradición llegó junto con la conquista y se practicaba la costumbre de jugar con agua y todo tipo de sustancias como huevos, azulillo, etc. Con la llegada del Obispo Diez Madroñero a Caracas, en el siglo XVIII, los carnavales se convirtieron en tres días de rezos, rosarios y procesiones, por considerar el Obispo que eran fiestas pecaminosas.
Al arribar el Intendente José Abalos, volvió nuevamente el carnaval a Caracas, aunque de forma más refinada, celebrándose con comparsas, carrozas, arroz y confites, dejándole a los esclavos y a la plebe los juegos con agua y sustancias nocivas.
Así llegó al siglo XX la tradición en Venezuela con carrozas, disfraces, bailes populares y en salones refinados. A mediados de los años cincuenta y hasta finales de los sesenta, apareció un nuevo elemento: las famosas «negritas», quienes escondían la identidad en el disfraz para disfrutar sin complejos de la festividad.
En la actualidad, casi está a punto de desaparecer esta tradición, sobre todo en la capital, pues no es de obligación el asueto, y los que no trabajan salen fuera de la ciudad. Son famosos en Venezuela los Carnavales de El Callao, en el Estado Bolívar, donde la inmigración antillana agregó al calipso elementos como el cuatro y maracas, y al compás del Ambakaila de la Negra Isidora (ya fallecida) han mantenido la tradición.
Referencias:
- C.A. Editora El Nacional. (s/f). Rostros y personajes de Venezuela.
- Fundación Polar Caracas. (1999). Diccionario de historia de Venezuela. [Documento electrónico].
- Mintur. (s/f). ¡Turismo para descubrir y conocer a Venezuela…! Año1, Nº 9.
- www.efemeridesvenezolanas.com (2007). [Documento en línea].
- www.gobiernoenlinea.gob.ve. (2007) [Documento en línea].
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